VALLADOLID, 8 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia de Valladolid ha condenado a una pena de un año y medio de prisión y al pago de una multa de 100 euros a Miguel Ángel M.L., frente a los tres y medio y la sanción pecuniaria de 200 que solicitaba el fiscal y la absolución pedida por la defensa, como autor de un delito de tráfico de drogas cometido el 1 de enero de 2015, fecha en la que fue interceptado en las inmediaciones de la discoteca 'Kerala' con cerca de 16 gramos de marihuana y 0,16 de MDMA.
En su sentencia, la Sección Cuarta de lo Penal de la Audiencia de Valladolid entiende que hay prueba indiciaria suficiente para considerar acreditado que la droga intervenida estaba preordenada al tráfico, en referencia al 'pase' a un cliente del que fue testigo uno de los agentes actuantes y la forma en la que el procesado llevaba distribuida tanto la mercancía como los billetes en distintos bolsillos de su pantalón, según informaron a Europa Press fuentes jurídicas.
Junto a ello, la sala califica de "significativo" el informe emitido por el Servicio de Orientación y Ayuda al Drogadicto (SOAD) que hace referencia a un consumo por parte del acusado desde los 14 años de cocaína y heroína, "estando abstinente respecto de ésta última, y no se mencione para nada un consumo de MDMA, como proclama el acusado para justificar que la droga que poseía era para su autoconsumo".
Durante el juicio, Miguel Ángel M.L. sostuvo que acababa de salir de la discoteca 'Kerala', sita en la Avenida Ramón Pradera, donde se encontraba con varios primos, sobrinos y amigos, y que su intención era fumarse un porro, hasta que la policía se abalanzó contra él y sus familiares, dos de los cuales, a raíz de estos hechos, fueron juzgados por delito de atentado a agentes de la autoridad y fueron condenados a seis meses de prisión.
En su caso, Miguel Ángel M.L. alegó que los casi 16 gramos de marihuana y los 0,16 de MDMA eran para su propio consumo, versión que contrasta con la ofrecida por los policías que le detuvieron y que ratificaron haber visto cómo una persona no identificada se acercó al acusado y le entregó un billete a cambio de una bolsa transparente con un contenido de color verde.
Los agentes trataron entonces de identificar al presunto traficante y éste, según mantuvieron, trató de huir y arrojó en su fuga fallida una pieza marrón rectangular que contenía 8,92 gramos de resina de cannabis.
Al procesado, que fue detenido a escasos metros, le fueron ocupadas dos piezas de color marrón--resina de cannabis--con un peso de 2,02 y 1,91 gramos, una bolsita termocerrada con otros 4,29 gramos de la misma sustancia, así como una bolsita con 0,16 de MDMA, junto con 130 euros repartidos en diferentes billetes y bolsillos del pantalón.
