SALAMANCA, 17 May. (EUROPA PRESS) -
El Paraninfo de la Universidad de Salamanca ha servido de punto de partida para la celebración en la ciudad del XXIII Congreso Nacional de Historia del Arte, organizado por la institución académica donde se celebran los actos y al Comité Español de Historia del Arte (CEHA).
En esta cita semipresencial por la pandemia, con siete ponencias, 150 comunicaciones y pósteres, los 250 congresistas reflexionan sobre el ámbito de estudio y nuevas metodologías y avances que incorporar a su trabajo.
La presidenta del comité organizador, Ana Castro Santamaría, ha explicado que este congreso bienal estaba organizado para marzo de 2020 pero que ,quince días antes de su apertura, tuvo que ser aplazado por la pandemia.
Ahora, en formato bimodal, se ha podido retomar por primera vez en Salamanca y con el afán de cumplir con las premisas marcadas desde que se celebrase el primer encuentro de este tipo hace cuatro décadas.
Por su parte, el presidente del Comité Español de Historia del Arte, Rafael López Guzmán, ha destacado las aportaciones de esta serie de encuentros desde su origen, en 1977, en la localidad de Trujillo, que incide en que "la historia del arte está muy viva".
Para ello, tal y como ha continuado, los profesionales de este ámbito tratan de, "frente al consumo acelerado y a alta velocidad", "observar con detenimiento, interpretar las formas y la historia" y hacerlo desde "metodologías de distintas áreas de conocimiento".
Asimismo, ha abogado por la importancia de este tipo de encuentro para "aportar nuevos modos" a "la búsqueda continua" de los expertos en historia del arte, quienes tratan de "romper fronteras en lo metodológico" para seguir dando pasos en la investigación; además de la incorporación de nuevas tecnologías que, por ejemplo, "permiten que la obra de arte pueda ser visualizada en cualquier parte del planeta".
AUTORIDADES
Entre los presentes han la inauguración del congreso han estado el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, encargado de cerrar con sus palabras el acto de apertura; el rector de la USAL, Ricardo Rivero; el alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo; y el presidente de la Diputación Provincial, Javier Iglesias.
El primero de ellos en tomar la palabra ha sido Javier Iglesias, quien ha mostrado su satisfacción por poder poner, desde la institución provincial, su "grano de arena" con la celebración, una entidad que, junto al Ayuntamiento de la ciudad, se encargará también de la publicación de las actas del congreso.
A continuación, el alcalde de Salamanca ha agradecido a la organización "haber mantenido viva la ilusión" por celebrar en la ciudad el acto, a pesar de que tuvo que ser aplazado en marzo de 2020 por la pandemia, y en su discurso ha destacado la capacidad patrimonial de Salamanca, que es "un auténtico museo al aire libre", y sobre la que ha reseñado la "intensa actividad de rehabilitación y puesta en valor" del consistorio, con "más de diez millones de euros" de presupuesto municipal en intervenciones durante la última década que ayuden a la conservación, protección y recuperación de bienes.
El rector de la USAL, Ricardo Rivero, ha destacado que "Salamanca es el laboratorio ideal para el estudio de la historia del arte", ya que es "el lugar apropiado por la tradición clásica de la universidad," o por el patrimonio que aglutina, donde "cada una de sus piedras cuenta una historia".
Finalmente, ha cerrado el acto el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, quien ha destacado la importancia de la conservación y protección del patrimonio que atesora la comunidad y su capacidad como "palanca de desarrollo" tanto en el medio rural como en las áreas urbanas, un papel que potenciará la Junta con una nueva Ley de Patrimonio Cultural de Castilla y León.
Fernández Mañueco ha asegurado que, en esta legislatura, la Junta va a incrementar el presupuesto anual destinado a la conservación y protección del patrimonio cultural, con el objetivo de garantizar el conocimiento, la investigación, la protección, la conservación, el uso y el disfrute del patrimonio.
"Lo vamos a sustentar con una nueva ley de patrimonio cultural", ha dicho sobre una iniciativa que llegará para "fortalecer la colaboración público-privada, promover la digitalización, poner las nuevas tecnologías al servicio del patrimonio en toda la cadena de valor".
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