VALLADOLID, 4 Ene. (EUROPA PRESS) -
Las cabalgatas de los Reyes Magos volverán en su formato más tradicional a las ciudades de Castilla y León, después de que en 2021 no se pudieran celebrar debido a las medidas restrictivas en el momento por la pandemia, aunque las precauciones ante el COVID-19 se mantienen y llevan a los ayuntamientos a preparar desfiles con recorridos más largos, por calles más amplias, e incluso por zonas no tan céntricas, además de contar con dispositivos algo más amplios para el control y vigilancia de las medidas sanitarias.
La situación actual de la pandemia, marcada por la ausencia de grandes restricciones de horarios o afluencia en la comunidad de Castilla y León, permite que estas tradicionales cabalgatas se puedan celebrar y sobre ellas solo rijan las medidas generales de obligatoriedad del uso de mascarilla y mantenimiento de la distancia mínima de 1,5 metros entre personas no convivientes.
Así, los ayuntamientos de las principales ciudades castellanas y leonesas han trabajado en los últimos meses para organizar estos desfiles que supondrán el regreso de Sus Majestades de Orientes a las calles, algo que en 2020 no fue posible en la mayoría de los casos.
Entonces, solo Valladolid, León y algún municipio de menor tamaño, realizaron recorridos en carrozas tiradas por caballos o coches pero sin un trayecto prefijado para evitar que las personas se concentraran en las calles para asistir al paso de los Reyes Magos. De hecho la Junta de Castilla y León sancionó a los ayuntamientos de ambas capitales con multas por que consideró que los eventos organizados incumplieron la prohibición de celebrar cabalgatas, pese a que los consistorios defendían que no se trataba de desfiles como los que se realizaban antes de la pandemia.
Ahora, por término general, sí que regresan esos recorridos tradicionales, con las familias asistiendo al paso de las carrozas de los Magos desde las calles como hasta 2020, pero con mascarillas y distancia, además de algunas modificaciones para evitar las aglomeraciones.
En el caso de Ávila, se celebrará la cabalgata con un cambio de recorrido, ya que en vez de entrar en el casco histórico se rodeará una parte de la muralla y acabará en la explanada situada ante el Centro de Congresos Lienzo Norte. Además, se mantendrá una de las últimas novedades incorporadas en años anteriores, con un tramo 'sin ruido' pensado para que puedan asistir personas con trastornos del espectro autista.
En Burgos se mantiene el itinerario habitual, desde la avenida Derechos Humanos del barrio de Gamonal hasta la plaza del Mío Cid. No se lanzarán caramelos, ni tampoco se pronunciarán los discursos que cada año llevan a los Reyes Magos al balcón del Teatro Principal, con el objetivo de evitar la aglomeración de personas en este emplazamiento. Además, se suspenden las habituales visitas a la residencia de Santa Teresa de Jesús Jornet y el Hospital Universitario.
En León se ha concebido un recorrido "más dinámico" que otros años para evitar aglomeraciones, que partirá desde la explanada de la Junta de Castilla y León, y continuará por Gran Vía San Marcos, Plaza de la Inmaculada, Gran Vía San Marcos, Plaza de Santo Domingo, Ordoño II, Glorieta Guzmán el Bueno, avenida de Palencia, avenida Ingeniero Sáenz de Miera para finalizar en el Parque de Bomberos.
Para poder disfrutar de la cabalgata se recomienda evitar las acumulaciones excesivas y se aconseja que se aproveche todo el recorrido por la ciudad, además del obligatorio el uso de mascarilla en todo momento.
En el caso de Palencia la cabalgata contará con el recorrido habitual anterior a la pandemia del COVID-19 y se han tomado medidas para reforzar el vallado, con más de mil vallas para que los espectadores puedan distribuirse por las calles de manera ordenada. Además, se contará con 20 personas más en el dispositivo de Protección Civil encaminado a controlar el cumplimiento de las medidas de seguridad.
En Salamanca se ha modificado el recorrido inicialmente previsto para la Cabalgata de Reyes, que no será el habitual al evitar las calles más céntricas y estrechas, utilizar solo avenidas y contar con un kilómetro más de distancia para evitar aglomeraciones por la pandemia.
En la ciudad de Segovia, la cabalgata cambiará su lugar de llegada, que será la Plaza Oriental, con el objetivo de facilitar el mantenimiento de la distancia de seguridad entre el público frente a la Covid-19. Además, trasladar el escenario en el lado opuesto del Azoguejo donde se celebra habitualmente tiene el objetivo, de que sea mayor el espacio disponible y además pueda facilitarse, en la medida de los posible, el mantenimiento de la distancia entre los espectadores, incluso que sea utilizable la extensión de la Avenida de Padre Claret.
Los niños de la capital soriana también podrán asistir a una Cabalgata similar a las que se celebraban hasta hace dos años, con el punto final habitual de la Plaza Mayor. Eso sí, se vigilará el cumplimiento de las medidas y no se lanzarán caramelos.
LANZAMIENTO DE CARAMELOS EN VALLADOLID
Mientras, en Valladolid también se ha modificado el recorrido para que sea más largo y espacioso, contemplado con el objetivo de "extremar las precauciones", por lo que generalmente discurrirá por calles amplias como el paseo de Zorrilla, San Ildefonso, Isabel la Católica y la plaza de Poniente. Además, en vías de dimensiones más estrechas, como por ejemplo la calle Lonja, no se permitirá la presencia de público.
El número de personas que participarán en la comitiva real será más reducido que en años anteriores, mientras que la concejal de Cultura y Turismo, Ana Redondo, aseguró este lunes que sí que se lanzarán caramelos "blandos".
En Zamora también se celebrará la Cabalgata de los Reyes Magos, con las medidas de prevención y seguridad por la situación de la pandemia.
