Se realizará en dos fases y prevé una inversión cercana a los 170 millones de euros
GIRONA, 10, (EUROPA PRESS)
El Conseller de Territorio y Sostenibilidad, Santi Vila, ha acordado con los alcaldes y representantes de Blanes, Tordera, Lloret de Mar y Tossa de Mar la prolongación de la carretera C-32 y que prevé una inversión total de 169 millones de euros.
En una reunión con los alcaldes de esta ciudad, Vila ha cualificado como "una obra clave" para el desarrollo económico del sud de la Costa Brava además de facilitar la movilidad interna de la zona.
Vila también ha hecho referencia a las más de 150.000 personas que se verán afectadas por esta ampliación y también a los más de 2 millones y medio de turistas que visitan estas localidades.
Las obras se realizarán en dos fases, una primera que conectará Blanes con Lloret y que tiene un coste de 71 millones de euros y que se espera que se empiece a ejecutar a partir de mayo; el segundo tramo, una circunvalación que envuelve Lloret que costará 98 millones y su inicio está previsto en 2018.
En la primera de las fases será la concesionaria Abertis quien se hará cargo de la inversión, y la segunda va ir a cargo de los presupuestos de la Generalitat.
El alcalde de Lloret ha recordado que, pese al acuerdo de este jueves, la decisión tendrá que aprobarse en un pleno del Ayuntamiento.
