BARCELONA, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -
La normalidad fue la tónica general durante la mañana en la estación de Sants de Barcelona, en el primer día de funcionamiento de la línea de alta velocidad en su conexión Barcelona-Madrid. No se produjeron atascos significativos en los accesos viarios a la terminal ferroviaria, y los taxis, autocares y autobuses pudieron acceder con normalidad a las inmediaciones de la estación para dejar a los viajeros.
Además de ponerse en marcha el AVE, esta mañana estrenaron su ubicación las paradas de taxi y autobuses de TMB de la estación ferroviaria. Los autobuses estacionan en la plaza dels Països Catalans, frente al acceso principal de la estación de Sants, con lo que sus usuarios ya no tienen que cruzar la calzada para poder entrar en el recinto, como había ocurrido hasta ayer mismo.
Por su parte, la parada de taxis está situada en la fachada posterior en la estación, en la plaza de Joan Peiró. Allí, había más vehículos que usuarios, y los taxistas lo atribuyeron al hecho de que los usuarios aún no están familiarizados con la nueva ubicación de la parada.
En la estación ferroviaria había más policías patrullando en relación a los días anteriores, coincidiendo con el estreno de la línea ferroviaria que a partir de hoy, enlaza Barcelona con Madrid pasando por Guadalajara, Zaragoza, Lleida y Tarragona.
En este sentido, el Ayuntamiento de Barcelona confirmó ayer que se ha habilitado un operativo especial de la Guardia Urbana que reforzará la seguridad en la estación y garantizará una buena movilidad en los accesos a la estación.
