BARCELONA, 26 May. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Parlament, Ernest Benach, afirmó hoy que la comisión de investigación que se creará en la cámara sobre la presunta financiación irregular de CDC con fondos del Palau de la Música "no ayuda nada" a reducir la desafección y la distancia entre ciudadanos y política, aunque eludió pronunciarse sobre si está a favor o no de que se impulse esta comisión.
En declaraciones a TV3 recogidas por Europa Press, pidió a los partidos que eviten la confrontación política que puede suponer la comisión, y una reflexión sobre sus dinámicas que lleve a "refundar" la política.
Por ello, tras constatar que se vive un final de legislatura complicado, con una crisis económica y social, destacó que "alguien tendría que plantear seriamente refundar la política en sus formas, porque hay pocos elementos que motiven a los ciudadanos a participar".
El tripartito, PP y C's entran hoy en el registro del Parlament la creación de dicha comisión, después de que el PSC decidiera este martes sumarse a la iniciativa. CiU aseguró que no la obstaculizará, pero retó al tripartito a investigar también el caso Pretoria e informes del Govern.
Pese a abogar por la transparencia, Benach lamentó hoy que los partidos utilicen cualquier elemento para provocar la confrontación, "y éste es uno de los motivos de cansancio de la gente".
Aseguró que tanto la reacción de CiU como la del resto de partidos eran previsibles y formaban parte "de un guión escrito con antelación". En consecuencia, insistió en que los partidos deben ser capaces de reinventarse, y advirtió de que esta tarea debe hacerse desde la serenidad y no en campaña electoral.
"Las maneras clásicas de hacer política están en un final de etapa. O se empieza a probar cosas nuevas y romper con dinámicas perniciosas o será muy complicado todo", avisó Benach, quien indicó que de esta reflexión saldrán nuevas maneras de hacer política.
"ESPECTÁCULO" EN EL SENADO
Como ejemplo de mala praxis política que favorece la desafección, el presidente criticó el "lamentable espectáculo" que vivió este martes el Senado, cuando el grupo del PP pidió a gritos la dimisión del presidente del Gobierno mientras que el PSOE se puso a aplaudirle.
"El Parlamento es un lugar para hablar, y no puede ser un sitio donde se falte al respeto y se convierta la cámara parlamentaria en un circo", concluyó.
