BARCELONA, 22 Feb. (EUROPA PRESS) -
El conseller de Educación de la Generalitat, Josep Gonzlez-Cambray, ha defendido la decisión de avanzar el inicio del curso en septiembre aunque ha insistido en aún "hay tiempo" para acabar de consensuar con la comunidad educativa cómo se aplicará esta medida.
Lo ha dicho en el pleno del Parlament de este martes tras una interpelación del diputado de Cs Nacho Martín Blanco, que ha acusado a Cambray de no haber contactado con el sector educativo y de generar "malestar y desamparo porque la decisión se ha tomado a escondidas, sin contar con la comunidad".
En su respuesta, Cambray ha asegurado que la decisión se ha tomado con el consenso del sector educativo teniendo en cuenta cuatro informes favorables del Consell Escolar de Catalunya, que decían que "las vacaciones de verano son demasiado largas", y ha defendido que es una medida que busca el beneficio de los estudiantes.
Además, ha recordado que este lunes el Consell Escolar de Catalunya aprobó por unanimidad esta medida al considerar que "disminuye el tiempo de desconexión del alumnado, favorece a los más vulnerables y no altera los derechos laborales de los trabajadores, al mantenerse las mismas horas".
Martín Blanco también ha acusado al Govern de querer suprimir las escuelas de educación especial y que esto afecta a la libertad de los padres de escoger la educación de sus hijos, algo que Cambray ha negado: "No hay ninguna intención, hay libertad de elección".
El diputado ha criticado que existe, a su juicio, un problema de libertad en el ámbito lingüístico y ha anunciado que Cs presentará un "contrainforme sobre la realidad de las lenguas en Catalunya", a lo que Cambray le ha contestado que no existe ningún conflicto de lenguas en las aulas y ha reivindicado el modelo de escuela catalana.
