'Esclavos del deseo' habla de la trata de personas, un drama ante el que "no se está haciendo nada"
BARCELONA, 10 Jun. (EUROPA PRESS) -
La escritora norteamericana Donna Leon ha publicado 'Esclavos del deseo', el caso número 30 de la serie del comisario veneciano Guido Brunetti, un personaje con el que se divierte escribiendo, y ha asegurado: "Brunetti y yo seguiremos unidos mientras disfrute de la escritura".
En rueda de prensa telemática, la autora ha asegurado que, tras 30 casos publicados y el 31 ya escrito, le sigue gustando el comisario y escribir este caso, que ha publicado en castellano Seix Barral y en catalán Edicions 62, "ha sido tan divertido como el primero", 'Muerte en la Fenice', en 1992.
Su receta para una buena novela negra es contar con un protagonista empático que guste a los lectores, ve una pérdida de tiempo "matar al malo", aboga por que no aparezca sangre y encontrar un tono agradable con el lector.
En 'Esclavos del deseo', el comisario Brunetti se enfrenta a un caso de trata de mujeres iniciado a raíz de la aparición de dos jóvenes inconscientes y malheridas a las puertas de un hospital.
Donna Leon ha explicado que cuando inició la serie de Brunetti no se planteaba "una cruzada para debatir problemas sociales" sino poder escribir una historia interesante, pero que como a su personaje no le gusta ningún tipo de abuso de poder ni injusticia.
Ha recordado que en uno de sus primeros libros ya abordó la esclavitud sexual y que dos décadas después sigue este drama con el mismo patrón "y no se está haciendo nada. Es como si la policía estuviera de vacaciones porque las víctimas son mujeres".
Sobre qué postura debe tomar un autor de ficción, Leon ha dicho que el escritor tiene que mostrar la realidad, escribir una historia e ir "con mucha cautela" porque debe ser el lector quien decida su posición.
"MÁS PESIMISTA"
Tras 30 novelas, el personaje de Brunetti ha cambiado, ha explicado Donna Leon: "A nivel intelectual es más pesimista viendo como el mundo va a peor. Su visión del mundo se ha ensombrecido y deteriorado".
La escritora ha explicado que percibe "un giro gradual hacia la derecha" a nivel político en el mundo, y ha dicho que le obsesiona el calentamiento global del planeta.
Sobre la pandemia, ha dicho que cree que en Venecia sus ciudadanos han podido "pasear por la calle porque antes era un ejercicio de nado entre humanos", pero que para los turistas y los que viven del turismo ha sido duro.
"No quiero escribir un libro obsesionada por la pandemia. No hay mucho que escribir", ha subrayado la autora.
La editora de Seix Barral, Elena Ramírez, ha destacado el gran surtido de secundarios que puebla la serie de Brunetti y la introducción constante de temas sociales, mientras que la Pilar Beltran, de Grup 62, ha subrayado la descripción de Venecia y la cercanía de los personajes.
