BARCELONA, 4 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Conselleria de Educación de la Generalitat ha elegido su propuesta de calendario escolar, que prevé el inicio del curso la segunda semana de septiembre y su final el 23 de junio, entre ocho alternativas que fueron analizadas por el grupo de trabajo constituido en octubre para analizar posibles propuestas para la modificación del calendario en aras de la calidad de la enseñanza.
Una de las propuestas es iniciar el curso la segunda semana de septiembre y acabarlo el 23 de junio, lo que generaría una semana de días no lectivos que se tendrían que incorporar a lo largo del curso.
Ofrece tres posibilidades, realizar vacaciones de otoño, en febrero o una prolongación de la Semana Santa, añadiendo días antes o después de los festivos. La segunda de las opciones dentro de esta propuesta es la que ha escogido la Generalitat y que envió al Consejo Escolar de Catalunya, que celebrará hoy su primera reunión.
Otra propuesta analizada por el grupo de trabajo es iniciar el 1 de septiembre y acabarlo el 23 de junio, propuesta que generaría dos semanas de días no lectivos. Una de estas semanas se colocaría a finales de octubre y la otra, o bien en febrero iniciando las vacaciones de Semana Santa el Viernes Santo y extendiéndolas a lo largo de la semana del Lunes de Pascua o incrementando los días de Semana Santa.
El grupo de trabajo también analizó la posibilidad de iniciar el curso el 1 de septiembre y acabarlo el 30 de junio, lo que generaba tres semanas de días no lectivos, que se distribuirían una a final de octubre, otra a mediados de febrero y la tercera antes o después de Semana Santa.
Otra propuesta sería iniciar el curso la segunda semana de septiembre y acabarlo el 30 de junio, lo que incluiría dos periodos no lectivos a mediados del primer y segundo trimestre. La Semana Santa cubre los días anteriores al Viernes Santo y acaba el Lunes de Pascua.
En las reuniones del grupo de trabajo se planteó otra propuesta, la de iniciar el curso la segunda semana de septiembre y acabarlo el 23 de junio, reduciendo los días de Semana Santa a los festivos y generando dos periodos no lectivos, uno en octubre y otro en febrero.
Los expertos del grupo de trabajo consideraban "más viable" el inicio del curso en la segunda semana de septiembre y, en cambio, "poco viable" la propuesta de acabar el 30 de junio. Asimismo, consideraba "fundamental" no incrementar el número de días lectivos previstos en el Pacto Nacional por la Educación, que establece entre 175 y 178.
En el grupo de trabajo se aportaron otras ideas como modificar el periodo navideño y comenzar el segundo trimestre el 2 de enero en lugar del 7 o proponer diferenciar el calendario de la enseñanza básica y de las enseñanzas postobligatorias.
