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BARCELONA, 28 Feb. (EUROPA PRESS)
Más de 7.500 entidades sociales han alertado de que las administraciones les deben 866 millones de euros --708 por parte del Govern y 157 relativos a los ayuntamientos--, lo que las está "empujando al cierre".
"La deuda pendiente está ahogando a las entidades no lucrativas que intentan luchar por la cohesión social en este momento de crisis y les está empujando al cierre", ha lamentado la presidenta de la Taula, Àngels Guiteras, que ha recordado que estas organizaciones ocupan a más de 100.000 profesionales y ofrecen cobertura a miles de catalanes.
A los 866 millones de euros que acumulan Govern y ayuntamientos, se deben sumar más de 33 millones de deuda por parte de organismos españoles, por lo que el tercer sector social ha dejado de percibir 900 millones de euros durante 2011 en concepto de contratos, convenios y subvenciones con las distintas administraciones.
"Además de las deudas estamos soportando más de 100 millones de euros debido al coste financiero de la deuda, cantidad que estamos dejando de destinar a proyectos sociales", ha concretado el presidente de la Confederación de Asociaciones Empresariales del Tercer Sector, Xavier Puig.
Por ello, las entidades sociales han enviado una misiva al conseller de Economía de la Generalitat, Andreu Mas Colell, para reclamar al Govern que, además de saldar la deuda, facilite el acceso al crédito y elimine los costes financieros.
MAYOR DEUDA DE SALUD Y JUSTICIA
Las consellerias de Salud y Justicia de la Generalitat son las que más deuda acumulan y pagan con mayor retraso las subvenciones y prestaciones sociales concertadas, según ha destacado Puig, añadiendo que el tercer y cuarto puesto lo ocupan los departamentos de Bienestar Social y Empresa, respectivamente.
"Los plazos de pago oscilan entre los 30 días y los 2 años", ha concretado, por lo que la media se sitúa en 180 días de retraso, cifra alejada de los objetivos comprometidos por el Gobierno español.
CIERRES Y DESPIDOS
La complicada situación financiera que atraviesan las entidades del tercer sector, sumada a una mayor demanda social debido a la crisis, ha culminado con el cierre de alguna de ellas y la presentación de expedientes de regulación de empleo (ERE) para reducir plantillas.
"Aunque no tenemos cifras exactas, muchas organizaciones ya han cerrado sus puertas, cancelando programas sociales y despidiendo parte de su plantilla", ha deplorado Guiteras, que ha reclamado al Govern que sitúe la cohesión social entre sus prioridades políticas.
