BARCELONA, 26 Ene. (EUROPA PRESS) -
El conseller de Interior de la Generalitat, Felip Puig, ha hecho público este jueves el presupuesto de su departamento, que sufrirá una disminución del 4,6% respecto al del año 2011, pasando de los 1.203 millones de euros a los 1.147, aunque ha certificado que continuarán garantizando el modelo de seguridad catalán.
En su comparecencia parlamentaria, Puig ha explicado que la situación actual les obliga a recortar, pero menos que el año anterior --cuando fue del 7,6%--, lo que permite no poner en riesgo "el núcleo esencial de los servicios".
No ha descartado poder convocar una nueva promoción de Mossos d'Esquadra y de Bomberos de la Generalitat, pero lo ha condicionado a cómo evolucione la negociación presupuestaria.
Dentro del gasto de personal, que representa el 88,5% del presupuesto del departamento, Puig ha anunciado que recortará un 16,3% la retribución de horas extras y también reducirá el gasto de contratación de personal para la campaña forestal.
Sin embargo, el presupuesto destinado a pagar sueldos aumenta un 2,3% pese al recorte de previsto en todos los trabajadores públicos porque este año deberán pagar a los 775 mossos que actualmente están en prácticas y serán nombrados definitivamente, a los 600 aspirantes que estarán en prácticas y a los 177 nuevos bomberos.
Por departamentos, en los que más se recortará serán en la Dirección General de Administración de Seguridad, un 55,3%; Protección Civil, un 34,1%, y en la Secretaría General, de un 18%.
Dentro de la Dirección General de Mossos, Puig ha anunciado que la principal novedad de este año es la creación de una unidad especializada en delitos económicos, una unidad central de delitos informáticos, la construcción de la comisaría de Salt (Girona) y la de l'Ametlla de Mar (Tarragona).
También prevé elaborar un nuevo plan director de los Bomberos de la Generalitat, un nuevo modelo de gestión de región única del cuerpo y las obras de ampliación y reforma del parque de Guardiola de Berguedà y el nuevo edificio del parque de Bomberos de Olot (Girona).
En el Servei Català de Trànsit (SCT), que estima una reducción de ingresos por la mejora de las conductas al volante y un mejor despliegue del mapa de radares, instalarán el control de velocidad por tramos, la velocidad variable en la B-20 entre Montgat y Barcelona, y un circuito cerrado de televisión en la C-16 entre Berga y el túnel del Cadí.
