MADRID, 2 Feb. (EUROPA PRESS) -
La compañía de 'handling' Newco tratará de subrogar al 25% de su plantilla, cuyos empleados trabajan como proveedores de otras aerolíneas distintas a Spanair, a otras empresas para que sigan desempeñando su actividad y no pierdan sus puestos de trabajo, según explicaron fuentes de la negociación a Europa Press.
La venta de las unidades productivas que mantienen las concesiones sería la última medida a tomar por los actuales gestores de empresa de 'handling' antes del cierre, ya que tras la suspensión de operaciones por parte de Spanair, de la que dependía el 75% de su facturación, la actividad de Newco es inviable.
Con los contratos que gestiona actualmente, la empresa "no tendría beneficio ni en cinco años", explicaron las mismas fuentes.
La mayoría de los empleados que podrán conservar su empleo se encuentran en Barcelona, además de unos pocos en Vigo, Oviedo y Las Palmas, donde Newco gestionaba el 'handling' de la portuguesa TAP, la rumana Tarom y otras compañías rusas.
La compañía ya ha planteado un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) para unos 1.000 del total de 1.345 trabajadores que tiene en toda España y que ha sido presentado ante el Ministerio de Trabajo.
Sin embargo, el Juzgado de lo Mercantil número 12 de Madrid, que tramita el concurso voluntario de Newco por un pasivo de 40 millones de euros, todavía no ha tenido conocimiento de ninguna de estas propuestas por parte de los actuales propietarios, la sociedad Posibilitum Business, ni de los administradores concursales, según fuentes jurídicas consultadas por Europa Press.
La juez titular, Ana María Gallego, tramita en estos momentos la conclusión de la fase común del concurso de acreedores y está pendiente recibir el informe patrimonial definitivo después de depurar el listado de acreedores de la compañía.
Posibililitum Business, que adquirió Newco al hacerse con el control de Teinver -la sociedad patrimonial del grupo Marsans propietaria al 100%-, presentó concurso de acreedores voluntario en marzo de 2011 ante el mismo juzgado que tramita la insolvencia del grupo Marsans.
Según fuentes del proceso, los propietarios consideraban que la empresa estaba saneada y buscaban comprador hasta que Spanair canceló sus operaciones el pasado viernes 27 de enero.
