BARCELONA, 26 Mar. (EUROPA PRESS) -
El padre de una víctima de abusos confesados por el exprofesor Joaquín Benítez, Manuel Barbero, ha pedido este martes que la Generalitat se reúna para investigar y "abrir un expediente sancionador a Maristas".
El padre que destapó el caso Maristas lo ha dicho en declaraciones a los periodistas después de que Benítez haya indicado durante el juicio que los responsables de su colegio conocieron uno de sus primeros casos de abusos sexuales en 1986 pero que no lo sancionaron, por lo que se sintió "amparado".
Barbero ha manifestado que no considera "una victoria" esta declaración del acusado de cuatro casos de abusos sexuales entre 2006 y 2010 a pesar de reconocer parte de los hechos --ha confesado dos de los casos--.
Sí ha resaltado que Benítez ha admitido que ya en 1986 los Maristas le pillaron y que después "le permitieron que siguiera trabajando" en el colegio de Sants-Les Corts de Barcelona.
Además, ha considerado que Benítez se ha mostrado inteligente y calculador en su declaración como acusado, y ha asegurado que en una conversación telefónica le dijo que había más profesores implicados y que los Maristas "hacían movimientos" de los docentes de un colegio a otro.
Ha asegurado que detrás del caso Maristas hay más de 70 víctimas pero que solo cuatro han llegado a juicio, y ha lamentado que la administración les ha "abandonado" mientras que la sociedad está reclamando un cambio de legislación en materia de abusos, según él.
Y ha apuntado que el conseller de Educación de la Generalitat, Josep Bargalló, ha dicho anteriormente que "las cosas en el caso Maristas se hicieron mal" y que la administración catalana todavía está a tiempo de rectificar, investigar y sancionar.
Por otro lado, ha comentado que al escuchar la declaración se ha "desmoronado porque, por mucho que haya reconocido los hechos" que le hizo a su hijo y a otra víctima, no lo considera una victoria.
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