Portabella (ERC) condiciona apoyos futuros al bipartito a consensuar la perrera en otoño

BARCELONA 13 Ago. (EUROPA PRESS) -

Un nuevo fracaso para definir una ubicación de la perrera le puede salir caro al bipartito. El presidente de ERC en el Ayuntamiento, Jordi Portabella, se muestra impasible sobre esta cuestión y advirtió hoy de que condiciona su apoyo al Gobierno municipal en temas de calado a consensuar una ubicación "a principios de otoño".

El bipartito buscó un emplazamiento para una nueva perrera, que denominó Parc d'Acollida d'Animals de Companyia (PAAC) y situó en el parque de l'Oreneta, que defendió férreamente hasta que en marzo lo tumbó la oposición en bloque. Una campaña mediática, junto con vecinos y escuelas de élite de la zona, se alinearon en contra de la ubicación, en el distrito de Sarrià-Sant Gervasi.

En declaraciones a Europa Press, Portabella afirmó que, de no tomarse la decisión en otoño, se producirá "un desacuerdo profundo" entre ERC y el bipartito que afectará a muchos otros temas. Una nueva perrera es una vieja reivindicación de las entidades animalistas porque la existente en Collserola es insuficiente y no ofrece las mejores condiciones a los perros.

La zona de la ciudad que tiene más números de acoger el nuevo equipamiento es la montaña de Montjuïc. Los republicanos no descartan ninguna ubicación siempre que los animales estén en buenas condiciones, que no implique contaminación acústica para los vecinos y que sea accesible, unas demandas "razonables" y que deben ser previas a cualquier propuesta.

El líder de ERC confía en que el bipartito no se volverá a inclinar por un emplazamiento "que no reúna estas condiciones", ya que sino estará otra vez en un callejón sin salida, afirmó. "Estoy convencido de que llegaremos a un acuerdo muy amplio entre todos los grupos", concluyó.

"FUERTES DISCREPANCIAS" SOBRE EL CATALÁN

Portabella también se mostró impasible sobre el nuevo reglamento de usos lingüísticos, que deberá garantizar la utilización del catalán "en todos los ámbitos y circunstancias". Acusó al bipartito de falta de sensibilidad por la forma en que plantea el uso del catalán, cuestión que les hace mantener "fuertes discrepancias" con el Gobierno municipal.

Según él, "el reglamento debe blindar el olvido frecuente que se produce en el bipartito sobre la utilización del catalán", en numerosas invitaciones y documentos públicos en las que "excluye" esta lengua y sólo se editan en castellano, como unas invitaciones del salón de moda The Brandery.