El conseller atribuye los accidentes al factor humano y a la crisis
GIRONA, 27 Jun. (EUROPA PRESS) -
El conseller de Interior de la Generalitat, Felip Puig, ha calificado la situación de la N-II a su paso por la demarcación de Girona de incomprensible desde cualquier perspectiva ya que es "indignante, un maltrato inversor y una injusticia".
Durante una conferencia este miércoles en Tribuna de Girona sobre 'El modelo de seguridad, una política de Estado', el conseller ha explicado que desde el Govern continuarán trabajando para reducir la siniestralidad en las carreteras, ya que después de conseguir un descenso del 16% en 2011, este año se está registrando un repunte del número de víctimas mortales.
Puig también ha admitido que en los últimos accidentes registrados también ha influido el factor humano debido a un exceso de imprudencia y falta de atención, que provocan salidas de las vías, avances en momentos inadecuados o la pérdida del control del vehículo.
Además, el conseller considera que los accidentes también han aumentado por culpa de la situación de crisis económica ya que no se cambian los neumáticos cuando corresponde, hay más coches viejos que tampoco se renuevan y hay menos gente que pasa la ITV.
Para controlar la situación, la Generalitat optará por aumentar la presencia policial en las carreteras y los controles, además de mover los radares a las cajas que actualmente están vacías para que la gente vaya con precaución y no corra más de la cuenta.
Ha apuntado que otra opción es la aplicación de la euroviñeta, ya que se reduciría el volumen que vehículos pesados en carreteras como la N-II.
CAMBIAR LOS CLICHÉS
Durante la conferencia, Puig ha recordado la intención del gobierno catalán de construir un sistema único de policía, que la estructura de Mossos d'Esquadra y Policías Locales se consolide como definitiva en el país; así, se romperían algunos de los clichés que existen actualmente en temas de seguridad y en otros campos.
"Si no se rompen los clichés no podremos superar la actual situación de crisis, los retos son grandes, los riesgos enormes y las iniciativas atrevidas, pero estamos convencidos que Catalunya no podrá aplazar grandes decisiones para después de la crisis, porqué éstas determinarán cuando y como se saldrá de la crisis", ha expuesto finalmente.
