Es un país seguro para proyectos económicos "claros y serios"
BARCELONA, 15 May. (EUROPA PRESS) -
La parte occidental de Rumanía empieza a ser un centro de interés para empresas españolas que, ante la crisis, quieren producir con precios más baratos, seguridad jurídica y sin complicaciones burocráticas, lo que la convierte en puerta de entrada a los mercados de Centroeuropa.
Desde finales de 2009 se han implantado una decena de pymes, que se suman a unas pocas pequeñas empresas que ya habían entrado antes, y que son fundamentalmente industrias, dedicadas a paneles solares, muebles, elementos para naves industriales, maquinaria, textil y alumunio, y alguna se dedica a la agricultura.
Los grandes nichos son precisamente la industria y la agricultura, ha explicado en una entrevista de Europa Press el fundador y director de la consultora Vía Rumanía, José Miguel Viñals, que desde 2007 asesora a empresarios españoles a implantarse en ese país, y este año empieza a hacerlo también para empresas de otros Estados.
La producción agrícola es sobre todo de trigo y maíz --aunque la tierra es apta para otros productos--, resulta ventajosa porque la zona occidental del país es plana, con mucha superficie disponible y barata --tanto por el terreno como por la mano de obra--, y hay fácil acceso al agua para el riego.
En cuanto a la industria, Rumanía es atractiva para un país que, como España, necesita internacionalizarse más, y hacerlo en el Este le proporciona tantos o más consumidores potenciales que otros países, "incluidos algunos grandes, como China y Brasil", aunque la crisis haya hecho caer también el consumo interno rumano.
Pero una gran ventaja de producir en ese país es tener una buena parte para exportar, porque la parte occidental de Rumanía --con Timisoara como eje-- tiene mejores infraestructuras que el resto del Estado y, "además, está muy cerca de red de comunicaciones de Hungría".
Viñals considera que España tiene una imagen de Rumanía "equivocada, porque no es un país del Tercer Mundo, y tiene sitio para pymes con proyectos claros y serios", incluidos los que requieren mano de obra cualificada.
Por eso, Inglaterra se está interesando en la zona occidental del país, e Italia está recuperando su gran presencia allí, aunque Alemania sigue siendo la industria extranjera más implantada, "históricamente".
