SANT CUGAT DEL VALLÈS (BARCELONA), 14 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Sant Cugat del Vallès (Barcelona) tiene previsto dar un paso más el próximo lunes en la protección del sector de Torre Negra con la aprobación inicial de la modificación del Plan General Metropolitano (PGM) para convertir la zona en suelo no urbanizable ordinario, mientras espera a la declaración de Collserola como Parque Natural.
El consistorio ya aprobó en julio del 2009 los informes ambientales y el trazado de ronda, en cumplimiento de una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) que anulaba el acuerdo para la especial protección de la zona, devolviendo así a los terrenos --por los que el grupo Núñez y Navarro mantiene un litigio desde hace años-- su condición de suelo urbanizable no programado.
Esta es la segunda vez que el Ayuntamiento inicia los trámites para proteger Torre Negra y declararla no urbanizable, tras la impugnación de Núñez y Navarro del primer trámite y la anulación por parte del TSJC de la anterior recalificación culminada en 2003.
La teniente de alcalde de Medio Ambiente, Marta Subirà, ha explicado a Europa Press que la modificación urbanística de este lunes responde al proceso iniciado después de la sentencia del TSJC, aunque ha señalado que la declaración de Parque Natural ofrecerá un argumento más para la protección de Torre Negra.
En este sentido, ha lamentado el retraso de la aprobación del decreto por parte de la Generalitat, aunque ha señalado que esperan que la Sierra de Collserola sea declarada Parque Natural "en las próximas semanas", tras un proceso que se ha prolongado durante más de cinco años.
También en declaraciones a Europa Press, fuentes de la Conselleria de Medio Ambiente de la Generalitat han asegurado que la aprobación del parque es inminente y que todos los trabajos han finalizado.
700 HECTÁREAS MÁS DE PULMÓN VERDE
El proyecto del Parque Natural de la Serra de Collserola pretende ampliar el espacio natural en cerca de 700 hectáreas --hasta las 8.262--, además de mejorar la protección existente del pulmón verde del área metropolitana de Barcelona.
Hasta nueve municipios compartirán la zona: Sant Cugat del Vallès --que aporta 1.865 hectáreas--, Barcelona --1.637--, Cerdanyola del Vallès --1.390--, Molins de Rei --949--, Sant Feliu de Llobregat, El Papiol, Sant Just Desvern, Montcada i Reixac y Esplugues de Llobregat.
La sierra es la frontera natural de Barcelona en su extremo norte, y con su vegetación mediterránea y cerca de 190 especies de vertebrados en la zona, que se extiende entre los ríos Besòs y Llobregat, está considerado como el pulmón más importante de la conurbación urbana. Su punto más alto es el Tibidabo, con 512 metros sobre el nivel del mar.
El parque recibe anualmente más de dos millones de visitas, de las que el 80% las realizan los ciudadanos de los nueve municipios colindantes. El proyecto de la Generalitat pretende modificar los límites de 21 sectores para mejorar la conectividad de los espacios naturales, si bien entidades ecologistas han criticado la posibilidad de crear espacios de regulación especial (ERE) en los lugares más cercanos a núcleos urbanos.
Dentro del futuro parque destacarán dos sectores con "valores naturales excepcionales", según la propuesta de Medio Ambiente, como son la Font Groga --112 hectáreas--, por la presencia de robles "de gran valor", y la Rierada-Can Balasc --379--, por contar con un bosque de ribera propio de la sierra litoral catalana.
