BARCELONA, 4 Abr. (EUROPA PRESS) -
Vueling han organizado este jueves una visita a uno de sus aviones para 30 niños con autismo del Centro de Educación Especial Can Rigol de El Prat de Llobregat (Barcelona), con el fin explicarles la experiencia de viajar.
La visita se ha organizado junto a Asociación Istea (dedicada a la integración de personas con Trastorno del Espectro Autista, TEA) y con apoyo de Sepla Ayuda, para familiarizar a los niños con la experiencia del vuelo "para que puedan sentirse más seguros y preparados en el futuro a la hora de viajar", informa la aerolínea en un comunicado.
Esta acción "se enmarca en el compromiso de la aerolínea con los pasajeros con necesidades especiales" y se complementa con la reciente creación de una guía de consejos para familias que viajan con niños con TEA, presentada junto a Lovaas Foundation en el marco del Día Mundial del Autismo.
Entre sus recomendaciones, se incluye la importancia de la planificación anticipada de los viajes, la familiarización con el entorno y el refuerzo de una experiencia positiva.
Un piloto y un tripulante de cabina, Julián Javier Pinedo y María Vela, han visitado el colegio y desde allí han acompañado a los niños al Aeropuerto de Barcelona, donde han podido explorar por dentro un avión de la compañía, incluyendo la cabina del piloto.
EXPLICACIÓN A BORDO
Durante la visita, el personal de Vueling ha explicado a los niños el funcionamiento y todas las fases de un vuelo y cómo operan los aviones, "algo especialmente significativo para aquellos que aún no han viajado en avión".
Se han detallado aspectos como el proceso de preparación del vuelo, las medidas de seguridad y las diferentes funciones de la tripulación.
Esta acción también ha contado con la colaboración de Sepla Ayuda, una fundación sin ánimo de lucro que ofrece apoyo y asistencia en diferentes áreas relacionadas con la aviación e impulsa proyectos sociales, educativos y de ayuda humanitaria.
La piloto Marta Senso, que también forma parte de la aerolínea, ha destacado la importancia de sentirse cómodo y seguro en el entorno de un avión pues "cada detalle, desde el sonido de los motores hasta el movimiento de la aeronave, puede influir en la experiencia de quienes viajan a bordo".
