Alejada de las polémicas y llevando su vida privada con discreción, Rosario Mohedano ha conseguido crear la familia que siempre había soñado. Y lo más importante para ella, seguir trabajando en su pasión, la música. Eso sí, al preguntarle sobre la situación que atraviesa su padre, Amador Mohedano, con la casa de Chipiona que heredó de su hermana Rocío Jurado, el rostro le cambiaba.