VALENCIA, 2 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Asociación de Víctimas del Metro 3 de Julio (AVM3J) considera que si el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, no sabe por qué ha de pedir perdón a las víctimas del accidente de metro que en 2006 se cobró la vida de 43 personas y dejó heridas a otras 47 "no merece ser presidente".
En el manifiesto con motivo de la concentración del 3 de enero la asociación explica que el mes de diciembre "nos trajo las declaraciones nada honorables del president de la Generalitat, que dice no saber por qué ha de pedir perdón a las víctimas del accidente de Metro del 2006".
Al respecto, se pregunta si "no le parece suficiente motivo la manipulación de la comisión parlamentaria o es que el hecho de que los comparecientes tuviesen que aprender las respuestas le parece bien". " ¿Tampoco ve Alberto Fabra motivo para pedir perdón el que se prohibiese a los profesionales de RTVV informar sobre el mayor accidente de metro ocurrido en España, es esa la televisión que el presidente ofrece a los valencianos", incide.
Por ello, desde la AVM3J creen que "los valencianos nos merecemos mucho más" y "políticos que no cedan ante las presiones, que actúen con dignidad, que reprochen las malas gestiones, que no permitan a las empresas públicas que ellos gestionan ocultar información ni manipular la investigación de un accidente que costó la vida a 43 personas".
"Los valencianos nos merecemos un presidente que sepa reconocer los errores. Los suyos y los cometidos por sus antecesores en el cargo. Porque no vale con decir yo no estaba cuando ocurrió el accidente, porque sí que estaba cuando las irregularidades han salido a la luz y debe reprochar esos actos y sancionar a las personas que los cometieron", ha insistido la asociación.
La AVM3J considera que "Fabra es conocedor de la falta de medidas de seguridad en la Línea 1; es conocedor de las mentiras vertidas alrededor de la investigación; sabe que desde FGV se borraron intencionadamente los datos de la caja negra; sabe que FGV mintió al perito judicial diciendo que no existían descarrilamientos anteriores al 3 de julio; sabe que el Partido Popular impidió el acceso de documentos y testimonios a la comisión parlamentaria, que podían indicar que el exceso de velocidad fue la causa de fallos en el vagón y sabe que un directivo de FGV ocultó un informe que indicaba que el tren del siniestro había llegado al final de su vida útil con dificultad para encontrar repuestos".
Así, insiste en que "Alberto Fabra sabe que las cosas se hicieron mal antes y después del accidente y si todavía no sabe por qué ha de pedir perdón es que no merece ser el presidente del Gobierno Valenciano. En sus manos está".
