CASTELLÓN, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -
El equipo de gobierno del Ayuntamiento de l'Alcora lamentó hoy en un comunicado la situación en la que se encuentran los trabajadores de la empresa Reyval, pero aclaró que "se equivocan plenamente al dirigir sus reivindicaciones y culpabilizar al Ayuntamiento", pues "el cierre viene motivado por una orden de la Conselleria de Medio Ambiente y se produce tras una inspección que sus técnicos realizaron a la empresa, a raíz de la cual también están en trámite dos expedientes sancionadores contra ésta".
Según explicó "que a la empresa se le conceda o se le deniegue la autorización no depende del Ayuntamiento en absoluto, sino de Conselleria, y ésta, tras efectuar la mencionada inspección, emitió un informe explicando que la empresa estaba realizando actividades para las que no cuenta con Autorización Ambiental Integrada (AAI), lo cual, evidentemente, va en contra de la normativa".
Por lo tanto, --añadió-- "es la empresa la única responsable de este cierre, al no cumplir con los condicionantes que la Ley le exige, y estos condicionantes no son un capricho de una administración, sino que se exigen a las actividades e instalaciones susceptibles de afectar al medio ambiente, como es el caso de Reyval, a fin de evitar que se produzcan agresiones al medio natural".
Además, según el equipo de gobierno, "de afectar al medio ambiente, esta actividad podría también afectar a la salud, de hecho, Sanidad, en la actualidad, está en contacto con los vecinos para estudiar el asunto", y recordó " hay vecinos que llevan más de dos años quejándose de los fuertes y desagradables olores generados por la mercantil".
"Esto se le hizo saber y se le ha hecho saber al gerente en multitud de ocasiones, a fin de que solucione el tema, y en todo este tiempo no ha sido capaz de hacerlo, por lo que él es el responsable de que en su empresa estén las cosas en regla o no".
