VALENCIA, 17 Oct. (EUROPA PRESS) -
La consellera de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente, Isabel Bonig, ha afirmado que el comité de empresa de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) será "el primero" en conocer el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de la empresa. Asimismo, ha añadido que "nunca se le ha negado ningún tipo de información".
Bonig se ha expresado de esta manera en la sesión de control al Consell en la que la diputada de EUPV Marina Albiol le ha preguntado de qué manera afectará el Plan estratégico de racionalización y reestructuración del sector público empresarial y fundacional de la Generalitat a FGV.
Entre el público se encontraban trabajadores de la empresa pública y les ha agradecido que los paros se hayan desarrollado esta jornada "con tranquilidad, sin incidentes y se hayan respetado los servicios mínimos". Además, ha pedido "disculpas y perdón, aunque entiendo el derecho a la huelga, a los ciudadanos que han podido ver alterado su utilización del sector público".
Bonig ha recordado que se está reestructurando el sector público empresarial de la Generalitat y ha dicho que FGV "no es ni puede ser un caso aislado", por lo que es el momento de "analizar todas las opciones sin descartar ninguna". Además, ha remarcado que esta reestructuración de la empresa comporta "reducción de medios materiales y humanos".
Por su parte, la diputada de EUPV Marina Albiol --con una camiseta de No al ERE en FGV-- ha reprochado que se alegue que FGV es deficitaria porque se trata de una empresa que ofrece un servicio público. Su situación, ha agregado, se debe en parte a la "nefasta gestión de los 17 directivos colocados por el PP" y a lo que debe la Conselleria.
Pero, esto "lo pagarán los trabajadores" ha señalado Albiol, quien ha advertido de que "si despiden a 400 o 500 personas habrá una reducción de servicios. Además, ha opinado que esta reestructuración "no es solo una cuestión económica, sino ideológica porque quieren privatizarlo todo". en conocerlo.
La consellera ha reconocido que "claro que la empresa es deficitaria" ya que por cada billete que se compra en Valencia, los valencianos pagan un euro para subvencionarlo y 3,77 euros para los comprados en Alicante.
"Es deficitaria", ha remarcado Bonig, quien considera que no es coherente "aumentar el déficit de las empresas públicas para dar un servicio más barato y que lo paguen las generaciones futuras". "Nosotros pretendemos hacer servicios públicos de calidad pero también sostenibles", ha apostillado.
