CASTELLON, 3 May. (EUROPA PRESS)
El subdelegado del Gobierno, Juan María Calles, aseguró hoy en un comunicado que si algún gobierno olvidó a la provincia de Castellón en lo referente al tren AVE fue el del PP, como así consta por escrito en el texto del acuerdo que suscribieron el Ministerio de Fomento y los presidentes de las comunidades autónomas de Madrid, Valencia, Castilla-la Mancha y Murcia el 8 de enero de 2001.
Según dijo, en dicho acuerdo, los firmantes "sellaron el compromiso de colaborar y adoptar las decisiones necesarias para que los tiempos de ejecución del AVE, en todas sus fases, se tramiten lo más rápidamente posible, reconociéndole carácter prioritario a este proyecto, con especial acento en la corrección de los impactos medioambientales".
"Es decir, visto el irrisorio grado de ejecución que el AVE Madrid-Comunidad Valenciana alcanzó en los años posteriores de gobierno del PP, es evidente que ese acuerdo se incumplió en lo más elemental", apuntó Calles.
En la información que proporcionó el Ministerio en la reunión que propició ese acuerdo, el 8 de enero de 2001, el estado del trazado del AVE Valencia-Castellón estaba "exactamente igual" que el PP lo dejó al final de la legislatura en 2004, dijo Calles, el cual agregó que " ha tenido que ser la actual Administración la que ha tenido que sortear todos los obstáculos y desbloquear la Declaración de Impacto Ambiental".
El subdelegado lamentó que el conseller de Infraestructuras "pretenda situar al ferrocarril de alta velocidad como la principal preocupación de los castellonenses", y le recordó que la autovía A-7 "está aún a medias cuando debía estar completa en todo el trazado de la provincia desde hace años; que ha tenido que ser el Ministerio de Fomento el que mediante un protocolo dé el impulso definitivo a las carencias en infraestructuras de la provincia, y que Castellón es la única capital de la Comunidad Valenciana que carece de transporte metropolitano, con todas las consecuencias que ello acarrea".
Por otra parte, el subdelegado se ha remitido al Diario de Sesiones del Congreso para rescatar una respuesta del ministro de Fomento, Álvarez Cascos, al diputado socialista Mario Edo el 5 de marzo de 2002, en la que el Ministerio "daba por hecho y terminado el corredor mediterráneo entre Castellón y Tarragona con las obras efectuadas en ese momento, y no fijaba ninguna otra previsión, lo que -dijo- coincide con la posterior ausencia de alegaciones por parte del Gobierno del PP a la red europea de transporte que negoció Loyola de Palacio en Bruselas".
Juan María Calles pidió al conseller de Infraestructuras "mayor honestidad" en las relaciones con el Gobierno a la hora de ofrecer su colaboración en la resolución de una trama viaria que los gobierno del PP "ni siquiera terminaron de definir", y, en este sentido recordó que la nacional 340 "la dejó el PP tal como la encontró, en la autovía A-23 se incumplieron todas las previsiones, las mejoras de la N-232 se paralizaron, y la conexión de la A-7 entre Almenara y Sagunto la ha tenido que adjudicar el actual Gobierno".
