Cerca de 15.000 espectadores han pasado por Sala Russafa durante su segunda temporada

La isla de Miranda
SALA RUSSAFA
Actualizado: viernes, 28 junio 2013 20:11

VALENCIA, 28 Jun. (EUROPA PRESS) -

Casi 15.000 espectadores han pasado por la Sala Russafa de Valencia en su segunda temporada en la que ha dado cabida a todo tipo de propuestas relacionadas con las artes escénicas y ha realizado una progresiva apertura a otras disciplinas como la música en directo, las proyecciones de cine o los monólogos de humor.

Según ha informado el centro cultural en un comunicado, este incremento de actividad se ha plasmado en un total de 185 funciones que han congregado a 14.864 espectadores entre los meses de octubre del pasado ejercicio y junio de 2013, lo que supone también un aumento de público.

Así, la misma fuente ha informado que en este momento "de contracción del consumo cultural", este crecimiento refleja que cada vez son más quienes encuentran el Sala Russafa "un punto de referencia" dentro del ocio de Valencia para niños y adultos.

A este respecto, ha aseverado que se trata, por tanto, de "un balance positivo que anima a trabajar en la tercera temporada" del centro que arrancará una vez haya finalizado el verano.

FIN DE TEMPORADA

Sala Russafa despedirá su segunda temporada con una propuesta "muy especial" que sirve también "como colofón" a su II Festival de Talleres de Teatro Clásico, una programación que ha incluido cinco propuestas en las que se han realizado diferentes acercamientos a los textos de autores que forman parte de la historia de la literatura, "recurriendo al teatro clásico para entender la sociedad y el ser humano de hoy día".

'La Isla de Miranda', que tendrá lugar este domingo a las 19 horas, utiliza las técnicas del teatro de sombras y se inspira en 'La Tempestad' de William Shakespeare "para reflexionar sobre las relaciones entre las personas, la incomunicación y la soledad a la que se tiene que enfrentar a menudo el individuo".

Un juego de luces y sombras transforma en imágenes las palabras de Miranda, una joven perdida en mitad del mar. En cierto modo, las dificultades a las que se enfrenta Miranda representan también a las que se encuentran en su vida cotidiana los intérpretes de esta obra. La compañía de teatro Sombras Avoramar está formada por personas con discapacidad intelectual que utilizan las artes escénicas "como medio de expresión artística y emocional, así como de inserción social" .

Mariola Ponce y Vicent Ortolá, de Teatres de la Llum, dirigen este taller que ya visitó el año pasado el festival con otra propuesta, 'Romeos&Julietas'. Este año vuelven con una nueva propuesta, "delicada, repleta de sensibilidad y belleza".