VALENCIA, 25 Mar. (EUROPA PRESS) -
El coreográfo Gustavo Ramírez y su compañía Proyecto Titoyaya presentarán desde mañana en el Teatro Rialto de Valencia su nueva propuesta de danza, que bajo el título de 'Lo que no se ve', habla de la "experiencia" del propio autor y de la parte de la creación que no es visible, porque está detrás del "glamour y del mundo elitista" de la danza, como "el ir y venir de los artistas o el tener que empezar siempre en cada lugar".
La bailarina de la compañía Verónica Moscardó y el responsable de Teatres de la Generalitat, Ferrán Benavent, presentaron hoy este espectáculo en rueda de prensa. La propuesta de la compañía Titoyaya permanecerá en el Rialto desde mañana hasta el domingo, tras el "éxito" que cosechó la función en su estreno la semana pasada en el Mercat de les Flors.
Moscardó explicó que en esta propuesta de danza, Gustavo Ramírez "habla de su propia experiencia" y da a conocer la parte de la creación que no se ve. "Detrás de la creación o el glamour de una persona que está dentro del mundo elitista de la danza, hay una parte que no se ve, y que es el ir y venir, el tener que empezar en cada lugar, el conocer siempre gente nueva, el ir cerrando etapas, el dejar cosas atrás, y el continuo inicio", resaltó.
Además, el espectáculo supone "el final de un ciclo dentro de la manera de coreografiar de Gustavo Ramírez". Se trata de una artista que, pese a su juventud, ha trabajado como coreógrafo freelance en las mejores compañías del mundo "y eso proporciona una manera de trabajar un poco condicionada por la ideosincrasia de cada uno de los espacios".
En este sentido, el proyecto Titoyaya "siempre ha sido una plataforma de experimentación en la que Gustavo se siente con más libertad y con más margen de maniobra dentro de la creación", subrayó la bailarina. Así, a lo largo de los cuatro años en los que lleva trabajando este grupo, el coreógrafo "ha conseguido cerrar ese ciclo y ha conseguido desarrollar aspectos que en otros sitios no ha podido realizar".
El espectáculo cuenta con seis bailarines, entre ellos, el propio Gustavo Ramírez, y algunos son valencianos, y otros procedentes de fuera. Sin embargo, todos llevan trabajando en Valencia desde noviembre este espectáculo a lo largo de cinco meses.
'Lo que no se ve' se estrenó en el Mercat de las Flors y surgió por el "interés" del director de este Consorcio, Francesc Casadesús, quien estuvo "persiguiendo a Gustavo Ramírez" hasta que comenzó este proyecto, explicó la bailarina. Asimismo, agradeció el apoyo de Teatres de la Generalitat y el Ayuntamiento de Valencia "que han hecho posible que estemos aquí en las mejores condiciones".
Por su parte, Ferran Benavente explicó que este espectáculo se enmarca dentro del segundo ciclo de la temporada internacional de Dansa Valencia, que comenzó hace tres semanas con la propuesta infantil 'El Meu Príncep'.
APUESTAS POR COREÓGRAFOS VALENCIANOS
Este segundo ciclo, se completa con las propuestas que presentarán Eva Bertomeu --que ahora está en el Festival Internacional de Danza de Lille a propuesta del Centro Coegráfico-- y Asún Noales, lo que supone "una importante apuesta importante por los coreógrafos valencianos"
En el caso de Gustavo Ramírez, subrayó que su trabajo "viene refrendado por su presencia en muchas compañías internacionales" y el éxito de su espectáculo 'Lo que no se ve', estrenado la pasada semana en el Mercat de las Flors.
Esta segunda parte de la temporada de Dansa Valencia dará pasao al ciclo denominado 'Nova Dansa Valencia' donde "se dará la oportunidad a gente todavía más jóven, con proyectos emergentes e incipientes" que se en el Teatro Talía.
El ciclo se ha creado con la voluntad de que "llegua a gran cantidad de gente", por lo que las entradas serán gratuitas para los estudiantes, con el objetivo de "convertir el Talía en un espacio de referencia para que los jóvenes se pueda acercar a la Danza". El cuarto ciclo se centrará con propuestas de altísimo nivel con la presencia del Ballet de Montecarlo o el Ballet de Teatres, entre otros.
El objetivo es, según indicó Benavente, "ofrecer al público valenciano danza de mucha calidad, hecha por gente de aquí o de gente de fuera", así como "normalizar que el público de Valencia pueda disfrutar de las mejores propuestas de danza, gracias al trabajo de Teatres y del Centre Coreográfic".
