CASTELLÓN, 19 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Diputación de Castellón ha activado en su primer pleno del año un total de 7,8 millones de euros de inversión con los votos del equipo de gobierno y el grupo Compromís para los Planes Provinciales de Obras y Servicios, que se han incrementado este año un 78 por ciento respecto a 2015.
El diputado delegado de la Oficina Técnica, Ibán Pauner, ha defendido esta "importante" inyección inversora a los pueblos como "el compromiso de Moliner por dar todo el protagonismo de la actuación de la Diputación a lo que los propios ayuntamientos deciden para cubrir las necesidades de sus municipios con más de 400 obras, en igualdad de condiciones para todos".
En ese sentido, ha destacado que "el trabajo del Gobierno provincial es sinónimo de respuesta útil al servicio de los municipios, y volcamos todo el esfuerzo inversor en responder a lo que los pueblos necesitan".
"Este esfuerzo se va a poder ver en muchas más actuaciones este año gracias a este importante aumento, que se traduce en más trabajo para las empresas locales y, por tanto, en más empleo en nuestros pueblos, especialmente en los más pequeños que son los que más lo necesitan por tener menos recursos", ha añadido.
Con 4,3 millones de inversión provincial durante el ejercicio 2015 se han ejecutado más de 200 obras en los municipios --200 ya culminadas y 22 aplazadas por petición de prórroga de los consistorios a este primer trimestre de 2016-- que han revertido en el mantenimiento de un millar de puestos de trabajo en la provincia.
RENUNCIA DE BARRACHINA
La sesión plenaria de este martes ha oficializado, con el apoyo unánime de todos los grupos políticos, la renuncia a la condición de diputado provincial de Miguel Barrachina, hasta ahora vicepresidente primero del Gobierno provincial.
El presidente de la Diputación, Javier Moliner, ha tenido para Barrachina unas "emotivas" palabras de agradecimiento, que han concluido el despacho extraordinario de la sesión plenaria. "Gracias por tu compromiso político y personal, por tu lealtad y dedicación incansable a nuestra provincia a través de la Diputación de Castellón, gracias por permitirnos aprender de ti cada día, gracias por dignificar la vocación de servicio público. Te vas a Madrid con toda la fuerza de este Gobierno provincial para defender y trabajar por Castellón. Mucha suerte", ha concluido.
Por su parte, el grupo socialista de la Diputación ha denunciado en el pleno la "utilización política" que está haciendo Javier Moliner de la institución provincial tras la aprobación de las bases de los Planes Provinciales de Obras y Servicios (POY) para el año 2016, "por ser arbitrarios y excluir a los ocho municipios de más de 20.000 habitantes, y en los que casualmente, no gobierna el PP", ha explicado el portavoz socialista José Benlloch.
El responsable socialista ha señalado que Moliner "ha cambiado las reglas del juego de las únicas ayudas regladas y objetivas que hay desde la Diputación" y ha destacado que "esta decisión no atiende a cuestiones legales, técnicas o económicas, sino exclusivamente políticos, ya que la cuantía a la que puede optar cada uno de estos municipios es solo de 30.000 euros".
Para Benlloch, "este modelo arbitrario y clientelista, que ya dejó ver el presidente cuando destinó el 80 por ciento del presupuesto de los convenios singulares a municipios gobernados por el PP y que afectaba a solo el 4 por ciento de la población, está haciendo bueno a Carlos Fabra".
Al mismo tiempo, el PSPV, que ha votado en contra de las bases de los Planes Provinciales de Obras y Servicios, entiende que es una "contradicción" que estos 8 municipios no puedan optar a las ayudas y subvenciones de la Diputación y haya once diputados que pertenezcan a estas localidades.
