El PNUD cree que para "eliminar" la pobreza hay que "multiplicar por dos" los recursos actuales dedicados a cooperación

Actualizado: miércoles, 29 marzo 2006 22:03

El director del programa de la ONU dice que el 0,7% para desarrollo es "muy poco" y pide cambiar las reglas del juego internacional

VALENCIA, 29 Mar. (EUROPA PRESS) -

El director adjunto del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), Jean Fabre, aseguró hoy en Valencia que para "eliminar" la pobreza "la cantidad de recursos que se necesita" supone "multiplicar por dos los recursos actuales dedicados a la cooperación internacional". Asimismo, consideró que "dedicar el 0,7 por ciento de los recursos" de los países desarrollados a la cooperación y el desarrollo es "muy poco".

Fabre indicó, durante la rueda de prensa que ofreció dentro del V Foro de la Alianza de Mundial de Ciudades Contra la Pobreza (Wacap), que hasta el próximo viernes se celebra en el Palacio de Congresos de Valencia, que este porcentaje es "la diferencia que hay entre la vida o la muerte para muchos". De este modo, señaló que "no es sólo una cuestión de dignidad individual, sino de buena gestión de la sociedad".

Comentó que a EEUU el primer año de la guerra de Irak le costó 80.000 millones de dólares y advirtió de que "si un país puede movilizar esta cantidad" para un conflicto bélico, también puede hacerlo para ayudar a otros.

Manifestó que el nivel de cooperación internacional actual es "bajo" y emplazó a "cambiar las reglas del juego internacional" y a "compartir los recursos con los demás", tras considerar que "las reglas de comercio" internacional contemplan "desigualdades importantes". Aseveró que la "pobreza de muchos es un lujo que nadie se puede permitir" y destacó que por esta razón "enfrentarse a ese problema es una prioridad absoluta".

Jean Fabre se refirió a los 'Objetivos del Milenio', marcado en 2000 por la ONU con el horizonte de 2015. Entre estos fines se encuentran la erradicación de la pobreza extrema y el hambre, el logro de la enseñanza primaria universal, la promoción de la igualdad entre los géneros y la autonomía de la mujeres, la reducción de la mortalidad infantil, la mejora de la salud materna, el combate del VIH/SIDA, el paludismo y otras enfermedades, la garantía de la sostenibilidad del medio ambiente y el fomento de una asociación mundial para el desarrollo.

El responsable del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo aseguró que, entre estos fines, "la ONU se ha fijado hasta 2015 la disminución del 50 por ciento la proporción de personas que viven en pobreza absoluta e impedir a 300 millones de personas, las que nacen en las zonas más pobres, caer en la pobreza".

"NO IMPOSIBLE"

Estimó que éstos son "un desafío importante pero no imposible" y advirtió de que por ello "es necesaria la colaboración internacional", al tiempo que sostuvo que otro de los objetivos es "disminuir el hambre en la misma proporción". Destacó también que otra de las "preocupaciones" en 2015 es "que todo niño tenga acceso al ciclo educativo de primaria" y "parar progresivamente el sida", una enfermedad que en Africa, apuntó, es "un desastre total".

Asimismo, se alegró de que se haya podido "mejorar" en algunos aspectos como el de reducir de un 28 a un 21 por ciento la cantidad de población que viven en pobreza absoluta. Dijo que este porcentaje "se ha bajado" aunque lamentó que se hace en "condiciones malas", por lo que consideró que "aún queda mucho trabajo por hacer" y que es "tiempo de compartir". Como ejemplo de colaboración se refirió a las medidas contra la gripe aviaria ya que, según manifestó, de nada sirve que se adopten políticas en Europa si las aves van y vuelven de Africa y allí no se aplica la prevención.

Jean Fabre apuntó que 1.000 millones de personas viven con menos de un euros al día, "en pobreza absoluta"; 2.800 millones con menos de 2 euros, "en un nivel de pobreza enorme", aunque la riqueza "ha crecido tres veces en los últimos años". Agregó que hay 800 millones de personas que padecen desnutrición y 500 millones hambre, además de haber 900 millones de analfabetos y 1.600 millones, sin acceso a la electricidad, lo cual significa, "que hay muchas personas en situación de incapacidad frente a muchas cosas de la vida", opinó.

Por otro lado, se refirió al papel que los gobiernos locales han de desempeñar para combatir la pobreza y la desigualdad. Comentó que la población mundial crece en torno a las ciudades y señaló que por ello son los ayuntamientos quienes tienen la "responsabilidad" de "gestionar muchas cosas".

Afirmó que atender las demandas de los ciudadanos supone "un desafío enorme en un mundo de comunicación total en el que nadie renuncia a tener acceso a nada" y mostró su deseo de que el Wacap se convierta en una especie de "universidad de participación de los alcaldes y municipalidades para afrontar los problemas de las ciudades".

Resaltó que entre los fines del V Foro para la Alianza Mundial de Ciudades Contra la Pobreza está el de lograr que los ayuntamientos conecten y conozcan los recursos que existen a nivel internacional en organismos como la ONU, la OMS, la Organización Internacional del Trabajo y el Banco Mundial.

El responsable del PNUD indicó que este "desafío" se extiende también al ámbito del medio ambiente. Criticó el "uso desigual de los recursos", entre los que destacó el agua. Consideró que garantizar su acceso a todos los ciudadanos es "un desafío enorme que se ha de afrontar a nivel municipal". Advirtió también del agotamiento del petroleo y lamentó que a diferencia de lo que sucede en los países pobres, el "consumo en los más ricos sea desproporcionado".

Apuntó como consecuencia de un uso indebido de los recursos el cambio climático y señaló que es necesario tener en cuenta "su magnitud y sus efectos", por lo que instó a adoptar "medidas preventivas".

En el Wacap, donde participan más de mil personas, se dan cita los principales actores de desarrollo y lucha contra la pobreza del ámbito nacional e internacional, así como representantes políticos de los 49 países menos desarrollados.