CASTELLÓN, 5 Sep. (EUROPA PRESS) -
El secretario general del PSPV, Ximo Puig, ha afirmado este viernes que el PP tiene una "gran responsabilidad" en el proyecto del Centro de Convenciones de Castellón del arquitecto valenciano Santiago Calatrava, pues "fue un dispendio, un despilfarro y una manera de hacer política que ha llevado a esta situación".
Puig, que ha realizado estas declaraciones ante los medios tras el inicio de la jornada interparlamentaria que celebra el PSPV en Castellón, ha apuntado que el actual presidente de la Generalitat y exalcalde de Castellón, Alberto Fabra, "le pidió a Camps que quería también su juguete Calatrava en Castellón y desde el primer momento fue un proyecto sin programa".
"Fabra quería un edificio de Calatrava en Castellón para lo que fuera, ferias, convenciones, por lo que se trataba simplemente de tener un edificio de Calatrava en Castellón, y ese fue el objetivo de Alberto Fabra y su amigo Paco Camps", ha añadido.
"TIRAR EL DINERO DE LOS CASTELLONENSES"
En opinión de Puig, ese proyecto, cuya ejecución se paralizó y que ahora está siendo investigado judicialmente, fue "un dispendio, un despilfarro y una manera de hacer política que ha llevado a esta situación, en la que hay dos responsabilidades, una penal y otra política de Alberto Fabra y Paco Camps y del conjunto del PP de tirar el dinero de todos los castellonenses por el gusto de tener un supuesto edificio de Calatrava en Castellón".
"Ésta es la manera de gestionar del PP, y cuando a veces se ha dicho que la derecha gestiona bien la economía, sólo tienen que venir a la Comunitat Valenciana y ver cómo la derecha ha gestionado la economía", ha apuntado el Puig, quien ha acusado al PP de "tirar el dinero de los valencianos y ahora no tienen dinero para lo fundamental como para atender a los niños con problemas de alimentación, atender las ayudas a los libros de texto o dar respuesta a los institutos tecnológicos y a tantas cosas fundamentales para revitalizar la economía".
Según Puig, en la Comunitat ha habido una "insuficiente financiación, una falta de liderazgo político y una gestión nefasta como en el proyecto de Calatrava".
