MADRID, 10 Feb. (EUROPA PRESS) -
La mantaza de miles de refugiados palestinos en Sabra y Chatila durante la primera Guerra del Líbano a principios de los años 80 recreada en un documental de animación. Esta es la arriesgada y aclamada propuesta que nos trae el cineasta israelí, Ari Folman, que en 'Vals con Bashir' recupera de su memoria los "agujeros negros" de su etapa como soldado israelí.
Un film con el que opta al Oscar a la mejor película de habla no inglesa, una categoría en la que ya fue premiado en los Globos de Oro, y que hoy presentó en Madrid. Una atípica mezcla de realidad e imágenes del subconsciente, que gracias a la animación le ha permitido tener la "libertad absoluta" para recrear esta matanza en la que perdieron la vida miles de personas.
Folman señaló que los responsables directos de aquella matanza fueron los falangistas cristianos y que el ejército israelí no dio ninguna orden, si bien el Gobierno israelí "sabe hasta dónde alcanza su responsabilidad" en aquella "masacre premeditada". Precisamente eso, apunta, la buena acogida que 'Vals con Bashir' ha tenido en Israel, ya que por un lado el Gobierno muestra la imagen de "país tolerante", que asume sus errores y por el otro 'Vals con Bashir' es una forma de mostrar "que la matanza no la hicieron los soldados israelíes, sino los falangistas del Líbano".
"Cualquier película es subjetiva, aunque intentes ser fiel a la realidad, y lo que queda de ésta es algo muy subjetivo mío", reconoció Folman que subrayó que su documental muestra los testimonios de nueve personajes reales, algunos ex soldados israelíes como él, que habían enterrado sus recuerdos "en lo más profundo de su memoria".
LAS PESADILLAS
Una noche en un bar, un viejo amigo de Folman le cuenta que tiene una pesadilla recurrente en la que 26 perros le persiguen. Ambos concluyen que ese sueño tiene que ver con una misión que realizaron para el ejército israelí durante la primera Guerra del Líbano. Folman escarba entonces en sus recuerdos y vuelve a su memoria lo peor de la guerra y el recuerdo de la matanza de Sabra y Chatila.
Esta fue la primera vez en veinte años, confesó, que hablaba de sus experiencias en la Guerra del Líbano, una contienda que no tuvo nada de "heroico". "No creo que el cine vaya a cambiar el mundo, pero puede tender puentes y rellenar huecos", afirma el director israelí que confirmó que 'Vals con Bashir' ya se ha visto en Palestina y en breve llegará a Egipto, Jordania o Marruecos. De hecho ayer mismo se cerró la distribución del filme en los países árabes. En España se estrenará el próximo 20 de febrero.
