'Hamelin' de Animalario y 'Mar i Cel' de Dagoll Dagom acaparan los IX Premios Max de Artes Escénicas

BARCELONA, 14 Mar. (EUROPA PRESS) -

El montaje 'Hamelin' de la compañía Animalario y el musical 'Mar i Cel' de Dagoll Dagom, ambas con cuatro galardones, han acaparado la IX gala de los Premios Max de las Artes Escénicas, que se celebró esta noche en el Barcelona Teatre Musical (BTM) y reunió a cerca de 2.500 personas.

'Hamelin', que ya había conseguido el Premio Nacional de Teatro, recibió el premio al mejor espectáculo de teatro, categoría en la que competía con 'Celebració' y la adaptación teatral del film de Benito Zambrano 'Solas', que junto con 'La Celestina' se convirtió en una de las perdedoras de la gala, que rindió homenaje a la ópera y a la zarzuela.

'Hamelin', que tiene como punto de partida la pederastia, también recibió el premio al mejor director de escena, Andrés Lima, y el dramaturgo Juan Mayorga, autor del texto, fue galardonado con el premio al mejor autor teatral en castellano.

En su intervención, Mayorga agradeció el galardón, que atribuyó al trabajo de la compañía Animalario y sobre todo a Andrés Lima, que fue quien creyó primero en mi texto". El montaje de Animalario también se llevó el premio al mejor empresario o productor privado de artes escénicas.

La otra gran triunfadora de la noche, que tuvo como escenario una barra de bar circular, fue el musical 'Mar i Cel' de la compañía Dagoll Dagom, que se llevó cuatro de los cinco premios a los que optaba. El musical fue galardonado como mejor espectáculo de teatro musical y recibió también los premios a la mejor composición musical para espectáculo escénico, por la melodía de Albert Guinovart, así como a la mejor dirección musical, a cargo de Joan Vives.

Precisamente, la gala estrenó hoy una nueva sintonía compuesta por Vives, autor de multitud de bandas sonoras para cine y televisión y que a partir de ahora acompañará a los Max en las próximas ediciones. 'Mar i Cel' también se llevó el premio a la mejor escenografía.

Una de las grandes perdedoras de la noche fue 'La Celestina' que, a pesar de estar nominada en seis categorías, recibió únicamente el premio a la mejor actriz de reparto por el papel de Carmen del Valle.

La otra gran decepción fue 'Solas', que aunque contaba con cinco nominaciones, se llevó únicamente el premio a la mejor actriz protagonista, que recayó en Lola Herrera. La actriz, una de las más aplaudidas de la noche, agradeció al guionista el hecho de haber escrito una película que "ahora también es teatro" y dedicó el galardón a su hija, Natalia Dicenta, con quien competía en este apartado. "Sin ella no habría sido posible, se lo dedico no como madre sino como actriz", recalcó.

La gala, diseñada por el controvertido director de escena Calixto Bieito, arrancó a ritmo de la zarzuela 'Gran Vía' de Arriaga para dar paso inmediatamente a la gimnasia, las acrobacias y los trapecistas, que se apoderaron del escenario con la voluntad de abrir la ceremonia a todas las disciplinas artísticas.

Conducida por el ingenioso actor Boris Ruiz, un asiduo de Bieito, la espectacularidad y el colorido fueron las notas predominantes en una noche mágica para las artes escénicas y de marcado acento catalán.

Bieito convirtió el escenario del BTM en una barra de bar circular en cuyo interior se situó la Orquestra de l'Acadèmica del Liceu, que bajo la dirección de Guerassim Voronkov interpretó temas de Wolfgang Amadeus Mozart, como fragmentos de 'Don Giovanni', y de Juan Crisóstomo de Arriaga, el auténtico protagonista musical de la noche de quien se pudieron escuchar las conocidas 'Manojo de rosas' o 'El niño judío'.

El presentador televisivo Boris Izaguirre y la actriz Clara Segura fueron los encargados de entregar los premios a la mejor adaptación de obra teatral, que fue a parar a Ernesto Caballero por 'El señor Ibrahim y las flores del Corán', montaje que también recibió el galardón al mejor actor protagonista a Juan Margallo poco después de que también a ritmo de zarzuela, la bailarina y coreógrafa Sol Picó dejara entrever la magia de su movimiento sobre la barra de bar.

Rodolf Sirera fue galardonado como mejor autor teatral en catalán por la obra 'Raccord', estrenada en el Teatre Nacional de Catalunya (TNC) en el marco del proyecto de dramaturgia contemporánea T6; la escritora y pedagoga Yolanda Arrieta fue reconocida como mejor autora en euskera por 'Groau' y Gustavo Pernas en gallego por la comedia 'Paso de cebra'.

Con el ritmo y el dinamismo que marcaron toda la gala, el director de escena Mario Gas subió al escenario a recoger el premio como mejor actor de reparto para Emilio Gutiérrez Caba, que no pudo estar presente en la ceremonia, por su papel en 'A Electra le sienta bien el luto'.

El premio al mejor espectáculo de revelación fue a parar a 'País Vasco, ¡Nasdrovia Chejov! de Vaiven producciones, el premio al mejor espectáculo infantil recayó en Animalico de PTV Clowns, el galardón al mejor diseño de iluminación fue para Miguel Ángel Camacho por 'Viaje al parnaso' y Joan Miquel Reig recibió el premio como mejor figurinista por 'La vuelta al mundo en 80 días'.

MARTA CARRASCO SE LLEVA DOS PREMIOS

La catalana Marta Carrasco se llevó el premio al mejor espectáculo de danza por la pieza 'Ga-gá', así como a la mejor coreografía.

Carrasco, que se mostró visiblemente emocionada, mostró sus deseos de "seguir trabajando" tras el éxito de esta obra que destaca por su formato de cabaret circense.

Tras deleitar a los espectadores con notas de Mozart, Eva Yerbabuena subió al escenario a recoger el premio como mejor intérprete femenina de danza por 'A cuatro voces' mientras en el apartado masculino el premio recayó en Cesc Gelabert por 'Psitt! Psitt!', una pieza creada junto a Lydia Azzopardi, con quien forma una compañía estable.

Además de estos premios, a lo largo de la noche también se entregaron el Premio de la Crítica, concedido a la Red de Teatros Alternativos; el Premio Nuevas Tendencias, que fue a parar al Teatro Pradillo de Madrid; el Premio de Honor Hispanoamericano, que recayó en el autor y guionista mexicano Víctor Hugo Rascón Banda; y el Premio de Honor, que reconoció la aportación a la danza de la coreógrafa Pilar López, en cuyo nombre recibió el premio la 'bailaora' Cristina Hoyos.

Esta es la segunda ocasión que la ceremonia de los Premios Max se celebra en Barcelona, después de que la capital catalana acogiera la gala en 1999 en L'Auditori. La Generalitat ha solicitado a la SGAE que Barcelona se convierta en la sede permanente de entrega de los galardones.