MADRID, 7 Jun. (EUROPA PRESS) -
El PSOE ha registrado una proposición no de ley en el Congreso en la que reclama que una comisión científica compuesta por historiadores de reconocido prestigio, revise el polémico Diccionario Biográfico editado por la Real Academia de la Historia, y que la difusión de todos sus tomos quede paralizada hasta que este órgano se pronuncie sobre las entradas en las que de haya detectado "falta de objetividad".
En la iniciativa, que el PSOE ha presentado para su debate en el Pleno del Congreso, se insta al Gobierno a exigir a la Academia que "proceda a la mejora", y en su caso, a la "rectificación" del diccionario. Su idea es que sea la propia Academia de la Historia la que constituya una comisión científica de historiadores de reconocido prestigio, con independencia de que pertenezcan o no esta institución.
Los socialistas hacen referencia en su texto a la "encendida polémica" que han provocado las "imprecisiones e incorrecciones históricas" que se han incluido en las biografías de algunos de los personajes que aparecen en la obra.
Recuerdan, por ejemplo, que de la figura de Francisco Franco "se destaca su valor militar", pero se obvia su "perfil represor" y se define su régimen como "autoritario, pero no totalitario, ya que las fuerzas políticas que lo apoyaban quedaron unificadas en un Movimiento y sometidas al Estado".
"INSOPORTABLE FALTA DE RIGUROSIDAD"
En resumen, el PSOE sostiene que el diccionario adolece de una "insoportable falta de rigurosidad y neutralidad" y recuerda que, según señala en su página web, uno de los objetivos de la Real Academia de la Historia es aclarar "la importante verdad de los sucesos, desterrando las fábulas introducidas por la ignorancia o la malicia, conduciendo al conocimiento de muchas cosas que oscureció la antigüedad o tiene sepultado el descuido".
Además, los socialistas recalcan que esa institución ha incumplido el compromiso de "dar una visión ecuánime" de los personajes históricos que iba a incluir en su diccionario, cuya elaboración ha costado 6,4 millones de euros aportados por los Ministerios de Educación e Industria, y tenía que haber estado listo a mediados de 2007.
ESTE MIÉRCOLES, EXPLICACIONES DEL GOBIERNO
La polémica sobre esta obra se trasladará este miércoles al Congreso de los Diputados donde tanto IU como el PNV tienen previsto pedir explicaciones al Gobierno sobre esta cuestión. En concreto, el diputado de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, tiene intención emplazar al Ejecutivo a retirar las subvenciones a la Real Academia de la Historia como se hace con organizaciones no gubernamentales que no cumplen los proyectos a los que se habían comprometido.
Por su parte, el PNV para preguntará a la ministra de Cultura, Ángeles González Sinde, cómo piensa paliar esas "omisiones deliberadas o tergiversaciones de la Historia" que se han puesto de manifiesto en perfiles como el de Francisco Franco.
