MADRID, 28 Abr. (EUROPA PRESS) -
"Todas las ciudades están construidas sobre crímenes y sucesos espantosos", senttencia el escritor Javier Calvo, quien acaba de publicar 'Corona de flores' (Mondadori), una novela gótica de horror que empieza en 1877 y transcurre en una "Barcelona sórdida".
"Me interesaba esta época tétrica de por sí. La restauración borbónica es un periodo bastante negro en la ciudad, de depresión cultural y política, miseria y brutalidad", detalló a Europa Press. Una Barcelona gris y humeante (bajo el 'Dosel de Sombras' causado por la industrialización), donde pululan obreros y tipos siniestros, también es uno de los 'personajes' de la obra.
En 'Corona de flores' la Ciudad Condal está amenazada por el llamado Asesino de la Esperanza, que elimina sus víctimas con altas dosis de crueldad. El violento inspector Semproni de Paula y el perturbador anatomista Menelaus Roca son los encargados de desvelar el misterio. Alrededor de ellos se mueven personajes inspirados en tipos comunes de la época como un novelista, individuos de los bajos fondos o políticos.
CIENCIA VS. RELIGIÓN
"La novela trata del conflicto entre ciencia, progreso y razón y religión, magia y superstición", subrayó Calvo, que creó dos personajes principales para representar este combate: Roca y De Paula, respectivamente.
Con una trama en la que nadie es totalmente bueno o malo ("una tradición de las novelas policíacas", matizó), 'Corona de flores' retrata una época de "atrocidades" como fue el siglo XIX. Calvo se documentó para trasmitir el máximo de realidad a sus personajes.
"El policía tortura y viola y eso puede parecer muy extremo, pero ésa era la conducta estándar de un profesional de la época", reveló, añadiendo que creó los personajes "que no tienen rasgos positivos para empatizar con la gente". "Pero supongo que algún interés despiertan, pues hay una cierta fascinación con la violencia", sentenció, recordando el éxito de la serie 'Dexter', que describe la vida de un asesino en serie.
POPULARIZACIÓN DE TEMAS SOMBRÍOS
Calvo (Barcelona, 1973) escribió la novela en sus ratos libres, entre una y otra traducción (ya pasó al castellano textos de Ezra Pound, Ted Hughes o Chuck Palahniuk). Pese a ser su tercer libro "oscuro" (después de 'Los ríos perdidos de Londres' y 'Mundo maravilloso'), el autor declaró no había planeado seguir por este camino desde el principio.
"A lo mejor tardé un poco a encontrar la voz y la temática que quería usar, aunque también existe la posibilidad de cambiar de opinión y volver a hacer lo que hice antes", declaró, en una referencia a sus anteriores obras 'Risas enlatadas' y 'Un dios reflectante'.
A Calvo le cuesta entender la popularización de los temas sombríos y macabros en la literatura, impulsados por fenómenos como 'Millenium' y 'Crepúsculo'. "Aún no he leído nada de Stieg Larsson y pensaba que era otra cosa. Pero vi la película y me quedé fascinado, era espantoso, habla de violaciones, incesto, nazis y eso es lo que lee la gente en el metro", puntualizó.
Después de dedicar tantas páginas a Londres, 'Corona de flores' es el segundo libro de Calvo que tiene Barcelona como telón de fondo. "Cuando empecé a escribir el panorama era distinto y yo tenía una cierta idea de que a la narrativa española le faltaba cosmopolitismo y que era necesario abrirse más al extranjero, pero estaba equivocado", detalló, confesando que su afición a la literatura anglosajona le llevó a este tipo de temática. "Alguna bronca me cayó, pero ahora estoy compensando", bromeó.
