MADRID, 25 May. (EUROPA PRESS) -
El ciclista español del Euskaltel-Euskadi Mikel Nieve ha reconocido que en esta fase del Giro en que "la carrera está en juego" los favoritos a adjudicarse la ronda transalpina "quieren ganar la carrera", de ahí que "los ataques" sean "muy fuertes", pese a lo que el ciclista vasco aguantó entre los mejores hasta los últimos kilómetros de la decimonovena etapa que se adjudicó Roman Kreuziger (Astana).
En la segunda etapa de la prueba italiana que se asciende alguno de los puertos de la cadena montañosa dolomítica, Nieve reconoció que había sido "una jornada muy dura, típica del Giro en los Dolomitas", algo que se explica por los tres puertos de primera categoría que han coronado.
"La carrera está en juego y los más fuertes quieren ganar la carrera, los ataques son muy fuertes. Me he encontrado bien y he estado cerca de los mejores, me ha faltado un poco para aguantar con ellos", valoró.
Pese a marchar en la decimotercera posición de la general individual, el escalador de Leitza dijo que "el balance" lo realizará próximamente. "Hoy han sido casi seis horas y media sobre la bicicleta y mañana aún tiene un kilometraje mayor y hay que pasar el Mortirolo y acabar en el Stelvio. Ahora solo pienso en recuperar fuerzas y descansar", zanjó.
