SEVILLA, 25 Ago. (EUROPA PRESS) -
El sorteo de la primera eliminatoria de la próxima edición de la Copa de la UEFA ha emparejado al Sevilla, vigente campeón de dicho torneo, con el Atromitos de Atenas, un rival muy inferior a los nervionenses que no deben tener el más mínimo problema para estar en la siguiente ronda.
Y es que, de hecho, el Atromitos, séptimo clasificado en la pasada Liga helena, jugará esta competición continental de 'rebote', en lugar del PAOK de Salónica, que fue sexto, pero al que la UEFA apartó al no cumplir los requisitos necesarios para ello.
De hecho, el Atromitos, como todo equipo griego que se precie, tiene una de sus principales bazas en su hinchada, ruidosa y apasionada, que convierte al ateniense Peristeri Stadium, con capacidad para 10.200 espectadores, en una caldera a presión que a buen seguro apretará de lo lindo a los sevillistas en la ida, que se jugará el próximo 14 de septiembre.
Pero más allá de esto, la plantilla del Atromitos, que dirige Giorgios Parasxos, no resiste a una comparación con la del Sevilla. No en vano, sus dos delanteros más destacados son el argelino Rafik Djebbour, con tan sólo seis goles en doce encuentros en la última campaña, y el liberiano Francis Doe, con idéntico número de dianas en 20 partidos. Por último, cabe citar al centrocampista e internacional argelino Alian Raguel, un jugador polivalente que también puede actuar como carrilero diestro.
Curiosamente, el Atromitos cuenta con una notable 'colonia' brasileña, entre la que resalta el ex centrocampista del Málaga B Roberto Merino, al que acompañan otros tres cariocas: otros dos jugadores de la media, Luciano y Anderson de Lima, así como el central Marcelo Oliveira.
