BARCELONA, 13 Nov. (EUROPA PRESS) -
El seleccionador de Catalunya, Johan Cruyff, ha comentado este martes que tras su marcha del combinado catalán todo el mundo en la Federació Catalana de Futbol (FCF) como en la afición buscará al exentrenador del FC Barcelona Pep Guardiola para intentar que sea sucesor, aunque ha pedido cautela ya que, siendo "sincero y honesto", el de Santpedor tiene solo 41 años y ya tendrá tiempo más adelante para aceptar este cargo "honorífico".
"Hay bastantes nombres que pueden serlo, pero son jóvenes y es difícil hacer las dos cosas cuando estás en otro país y en un club, aunque esto no es un trabajo de todo el año que te quite el sueño, es más bien honorífico y hay que ver quién puede hacerlo. Imagino que todo el mundo buscará a Guardiola, pero hay que ser sincero, honesto, él ahora tiene 41 años, y hay tiempo", manifestó.
De momento, lo único seguro es que ha llegado la hora de dejar paso a otro seleccionador más joven. "Lo dejo porque he llegado a los 65 y es la jubilación, ¿no? Lo pienso así, hay que dejar paso a la siguiente generación, siempre estaré ahí para lo que sea pero el primer espada tiene que ser otro. He cumplido con mis deseos, me recibieron y trataron siempre muy bien como jugador y entrenador", agradeció.
"Vine en tiempos de Franco, que se ha pasado la etapa bien, y aunque me criticaron mucho por venir a un país fascista entonces, me he quedado a vivir aquí en Cataluña, donde estoy a gusto, y mentalmente he pagado mi deuda siendo jugador, entrenador y seleccionador", aseveró en este sentido.
Preguntado por el futuro de Cataluña y la posibilidad de que la selección compita a nivel internacional, pidió tiempo. "Esperamos a ver qué pasa en el futuro, nosotros tenemos que trabajar sobre la marcha y hay que estar muy agradecidos a los jugadores que siempre han participado en estos partidos haciendo país, porque no hay nada que pudieran ganar más allá del orgullo de representar a su país", explicó.
Por ello, quiere que en este último partido como seleccionador, el 2 de enero de 2013 en Cornellà-El Prat, el público responda. "Si coges a una cantidad de jugadores enormes, que se prestan a jugar un partido más solo por la camiseta o para el país, hay que tener el máximo respeto. Si el campo no se llena es una falta de respeto para los jugadores", aseguró.
