MADRID, 25 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Federación Nacional de Empresarios de Instalaciones Deportivas, que representa a un sector que cuenta con cerca de 16.000 instalaciones de toda España y emplea a unas 75.000 personas, quiere manifestar "su total desacuerdo e indignación" ante la decisión del Ejecutivo de aumentar la carga impositiva que graba este sector en 13 puntos (del 8 al 21%), una medida que no hará sino asfixiar, aún más, a un sector que ya se ha visto muy afectado por la pérdida de clientes derivada de la crisis económica.
FNEID señala en un comunicado que viene "reclamando desde hace tiempo" a los representantes políticos, que esta actividad se beneficie de un tipo impositivo sobre el valor añadido de "carácter superreducido" -es decir, del 4 por ciento-, según lo dispuesto en la Directiva 2009/47/CE, cuyo fin es favorecer aquellas actividades, entre otras, que tengan como fin proporcionar salud y bienestar, como es el caso.
Según los datos que maneja FNEID, cerca de 9 millones de personas en España practican ejercicio físico en instalaciones deportivas, con lo que un aumento de este gravamen para los consumidores tendrá unas devastadoras consecuencias sobre la salud y sobre el gasto sanitario, puesto que la patronal estima que el número de usuarios disminuirá en un 11 por ciento.
Con todo y con ello, la federación considera, además, que este aumento del IVA "ahogará, aún más, a un sector que ya de por sí está muy dañado por la crisis económica, ya que los gimnasios han tenido que reducir considerablemente su margen de beneficios debido a la pérdida de clientes".
Así, la patronal de los gimnasios estima que de no revocarse la decisión, el sector perderá más de 4.000 puestos de trabajo y se cerrarán unas 800 instalaciones deportivas, lo que se unirá al cierre ya de más de 700 instalaciones deportivas privadas y la desaparición de unos 3.600 empleos directos.
Además, en su comunicado, FNEID recuerda que en Portugal se adoptó, hace ahora casi un año, una subida del IVA similar, el 5 al 23 por ciento, y que en el país vecino 100.000 personas abandonaron los centros deportivos, el 82 por ciento de los gimnasios que no repercutieron la subida del IVA a sus clientes han quebrado, el volumen de negocios del sector ha bajado en 55 millones de euros y se ha destruido el 10 por ciento de la mano de obra que empleaba este sector.
En el lado contrario está el de Irlanda, donde esta actividad se rige en la actualidad por la tasa reducida, no existiendo la superreducida. En el verano de 2011, el Gobierno irlandés adoptó la decisión de bajar la carga impositiva que gravaba esta actividad del 13,5 al 9 por ciento, con el objetivo de revitalizar la industria del entretenimiento.
