BRUSELAS, 10 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea abrió hoy una investigación en profundidad para comprobar si el aval del Gobierno de Lisboa a un préstamo de 450 millones de euros concedido por cinco entidades portuguesas para rescatar al Banco Privado Português vulnera las normas comunitarias sobre ayudas públicas a bancos afectados por la crisis financiera.
El Ejecutivo comunitario aprobó inicialmente esta medida el 13 de marzo de 2009 para un periodo de seis meses. El visto bueno de Bruselas estaba condicionado a la presentación de un plan de reestructuración que garantizara la supervivencia del banco sin más ayudas públicas.
Sin embargo, este plan todavía no se ha presentado. Además, el pasado 5 de junio Portugal prolongó la garantía otros seis meses sin notificarlo previamente a Bruselas. La Comisión duda que este aval se ajuste todavía a las normas comunitarias, tanto por lo que se refiere a su duración como a su coste.
"La Comisión debe evaluar si la garantía de Estado para Banco Privado Português permite restablecer la viabilidad de la entidad sin distorsionar indebidamente la competencia", explicó la comisaria de Competencia, Neelie Kroes, en un comunicado.
"También debe verificar si el plan que Portugal debe presentar a la Comisión será suficiente para estabilizar la situación sin que sean necesarios más recursos públicos", subrayó.
En todo caso, el Ejecutivo comunitario precisó que la apertura de una investigación formal no prejuzga su resultado y es un paso necesario para garantizar la seguridad jurídica a los afectados.
