Promoverá los corredores energéticos en el suroeste del continente
MADRID, 27 Oct. (EUROPA PRESS) -
La presidencia española de la UE trabajará para poner en marcha de forma "inmediata" un sistema completo de supervisión financiera en la Unión para evitar que se repitan crisis como la que se padece en la actualidad, ha anunciado hoy la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega.
En concreto, se buscará poner en funcionamiento cuatro instituciones que garantizarán las "buenas prácticas" económicas en la Unión: el Comité Europeo de Riesgo Sistémico --encargado de velar por la estabilidad macroeconómica-- y las tres Autoridades Europeas de Supervisión, que ejercerán labores de control en los sectores bancario, inmobiliario y de seguros.
La presidencia española también promoverá el establecimiento de un Marco Europeo de Supervisión Financiera sobre la base del Informe Larosière y de las propuestas legislativas presentadas por la Comisión Europea en septiembre pasado.
El Gobierno, que tendrá que ocuparse de revisar la Estrategia de Lisboa --el plan para modernizar la economía europea--, quiere con ello "impulsar transformaciones estructurales de calado que afectarán tanto a la economía financiera como a la real", indicó De la Vega, que preside tanto la Comisión Delegada del Gobierno para la presidencia española de la UE como su comité organizador.
Al Ejecutivo también le tocará revisar la Estrategia Europea del Empleo y uno de sus objetivos será conceder "mayor protagonismo a los interlocutores sociales", al tiempo que favorecerá una "mayor coordinación en materia laboral y de seguridad social", avanzó.
ATENCIÓN A LA INNOVACIÓN.
De la Vega adelantó que España concederá también una atención especial a la educación y la innovación porque constituyen "factores competitivos de carácter estratégico" y propondrá "iniciativas que faciliten la movilidad" de alumnos, profesores e investigadores con el fin de que "el conocimiento circule por todo el continente con tanta facilidad como el euro".
Recordó que tras la conclusión del Proceso de Bolonia, será responsabilidad de la presidencia española ocuparse de profundizar el Espacio Europeo de Educación Superior, consensuar las líneas de acción de la conferencia ministerial de Viena-Budapest de marzo, además de que presidirá el Grupo de Seguimiento de Bolonia.
En el ámbito de la energía, precisó que la apuesta principal del Gobierno será poner en marcha un "auténtico Mercado Interior de la Energía, desde donde sea posible avanzar hacia la interconexión a través de redes energéticas transeuropeas".
Con el objetivo de diversificar e interconectar el suministro, la presidencia española "promoverá preferentemente los corredores energéticos situados en la parte suroccidental de Europa". Así, presentará el Plan para el Anillo Mediterráneo de gas y electricidad, con el apoyo de la Comisión, y celebrará un seminario de alto nivel sobre esta cuestión en Orán en abril.
España organizará también en mayo en Valencia una conferencia de alto nivel sobre el Plan Solar Mediterráneo, una de las iniciativas de la Unión por el Mediterráneo, la asociación entre la UE y sus vecinos de la ribera sur.
PIDE COLABORACIÓN A LOS GRUPOS
La presidencia española de la UE en el primer semestre de 2010, resumió, no será una presidencia de mera "gestión", sino "proactiva y propositiva, de acción y liderazgo constructivo".
La portavoz del Ejecutivo concluyó su intervención inicial pidiendo la "colaboración" de todos los grupos durante la presidencia española de la UE, que arrancará el próximo 1 de enero, porque está en juego "no sólo el prestigio de España", sino la Europa del futuro.
En su opinión, a los representantes de la ciudadanía les "corresponde una parte importante de la responsabilidad de transmitir" a los ciudadanos "lo que significa para España y para cada uno de los españoles y españolas esta presidencia".
