MADRID, 31 Oct. (EUROPA PRESS) -
Alitalia, en proceso de venta y gestionada por tres administradores concursales desde mayo de 2017, ha recibido dos ofertas vinculantes y una manifestación de interés no vinculante, según ha confirmado este miércoles la aerolínea.
En un comunicado, Alitalia ha anunciado que los comisarios extraordinarios han recibido dos ofertas vinculantes y una expresión de interés no vinculante aunque no ha desvelado los nombres de las compañías que las han formulado, una vez que este miércoles, día 31 de octubre, finalizaba el plazo para la recepción de ofertas de compra.
"En los próximos días, los comisionados examinarán detalladamente la documentación recibida y posteriormente transmitirán sus decisiones al Ministerio de Desarrollo Económico", ha añadido la aerolínea italiana.
La entidad ferroviaria pública de Italia, Ferrovie dello Stato (FS), decidió ayer mismo presentar una oferta por Alitalia, mientras que otras grandes compañías, como Lufthansa o Eni, han decidido quedarse al margen del proceso. FS tampoco ha adelantado si pujará en solitario o junto con otro socio sectorial, entre los que se rumoreaba que podrían estar China Eastern o Delta Air Lines.
Por su parte, easyJet ha presentado este miércoles una "expresión de interés revisada por un Alitalia estructurada", en el marco del proceso de venta de la aerolínea abierto por el nuevo Gobierno italiano, que controla el 15% del capital de la compañía transalpina.
La coalición gobernante, formada por Movimiento 5 Estrellas y la Liga Norte, espera que la venta pueda finalizarse este año, al tiempo que indicó que varios inversores privados se habían interesado. El proceso de venta tendría que haber concluido en abril, pero se pospuso por las elecciones.
La aerolínea británica de bajo coste, que ya el año pasado mostró su interés por Alitalia, señala en un comunicado que dada la naturaleza del proceso de venta, sobre el que además no hay ninguna certeza, el contenido de su oferta está sujeto a confidencialidad.
Alitalia solicitó en abril de 2017 ser puesta bajo administración extraordinaria --ya lo estuvo hace menos de una década-- tras el rechazo de la plantilla al nuevo plan de negocio 2017-2021, que incluía medidas para reducir en 1.000 millones de euros sus costes y una reducción de personal.
