BRUSELAS, 4 May. (EUROPA PRESS) -
El Defensor del Pueblo Europeo, Nikiforos Diamandouros, no ha encontrado "ninguna prueba" de que la Comisión Europea violara la obligación de confidencialidad en el caso de compra de la aerolínea Aer Lingus por Ryanair. Admite que se produjeron "filtraciones a la prensa" pero no cree que puedan ser imputables al Ejecutivo comunitario.
Esta es la principal conclusión de la investigación iniciada por Diamandouros a raíz de una denuncia de 2007, en la que Ryanair acusaba a Bruselas de romper la confidencialidad y divulgar documentos con información "muy sensible" que la compañía irlandesa le había entregado.
No obstante, el Defensor del Pueblo Europeo criticó a la Comisión por aplicar al expediente abierto por la compra de Aer Lingus una declaración de confidencialidad "inadecuada" en la que se exigía a terceros (es decir, a Aer Lingus) firmar dicha declaración cuando el Ejecutivo comunitario le hizo llegar datos procedentes de Ryanair.
A su juicio, la declaración de confidencialidad no era "suficientemente clara" en las obligaciones que contraía Aer Lingus para proteger la confidencialidad de los documentos de Ryanair.
El Defensor del Pueblo Europeo constató que sí fueron divulgados en la prensa detalles de la información y lo consideró como una "violación grave de confidencialidad". Sin embargo, consideró que "no hay ningún elemento" que demuestre que la Comisión está en el origen de estas filtraciones.
Diamandouros también instó a Bruselas a "reforzar su cooperación" con las autoridades nacionales de Competencia para garantizar que la información confidencial que les es entregada no sufra filtraciones.
Ryanair notificó al Ejecutivo comunitario en octubre de 2006 su intención de comprar Aer Lingus, pero, tras una investigación, Bruselas determinó en junio de 2007 que esta operación era incompatible con el mercado único.
