MADRID, 24 Jun. (EUROPA PRESS) -
El negocio generado por los locales de restauración ubicados en áreas de servicio, aeropuertos y estaciones de ferrocarril y marítimas se situó en 2009 en unos 1.000 millones de euros, lo que supone un retroceso del 9,5% respecto al ejercicio precedente, en un contexto marcado por el menor movimiento de viajeros y la contracción del consumo privado.
Según el informe de DBK 'Restauración en ruta', pese a este descenso de las ventas, el mercado de la restauración al viajero mostró un comportamiento menos negativo que el de otros segmentos del sector de la restauración.
En marzo de 2010 estaban operativos 3.000 locales de restauración en áreas de servicio, una cifra que ha ido aumentando a un ritmo anual de unas 50 unidades en los últimos dos años.
Estos locales registraron una facturación de 650 millones de euros en 2009, un 8,5% inferior a la del año anterior. No obstante, este segmento continúa siendo el de mayor importancia en el negocio de la restauración en ruta, al concentrar el 65% total.
La estructura empresarial se caracteriza por la presencia de los principales operadores petrolíferos, aunque las primeras posiciones en términos de facturación están ocupadas por empresas especializadas en servicios al viajero.
CAE UN 13,8% EL NEGOCIO EN AEROPUERTOS.
Por su parte, el negocio de los establecimientos ubicados en aeropuertos, que entre 2004 y 2007 creció a tasas anuales superiores al 10%, fue el que experimentó un peor comportamiento en 2009, al descender su cifra de negocio un 13,8%, hasta 237 millones de euros. En marzo de 2010, contaba con de 302 establecimientos.
En las estaciones de ferrocarril, con 197 locales de restauración, las ventas retrocedieron a tasas anuales de entre el 4% y el 6% en el periodo 2008-2009, hasta situarse en 85 millones de euros en el último año.
En cuanto a la restauración en las estaciones marítimas, el informe pone de manifiesto que los 28 puertos comerciales dependientes de las autoridades portuarias disponían en marzo pasado de un total de 145 establecimientos, con unas 50 aperturas en los últimos dos años. Pese al aumento de la oferta, las ventas bajaron un 7%, hasta 28 millones de euros.
