MADRID, 15 Mar. (EUROPA PRESS) -
El turismo puede ser una pieza clave para el desarrollo de la integración europea, por lo que es importante que los países comunitarios desarrollen políticas turísticas comunes que permitan además afrontar los diversos retos del sector (terrorismo, desastres naturales y epidemias), según las conclusiones de los 300 delegados reunidos por la Organización Mundial del Turismo (OMT) en Vilnius (Lituania).
"El turismo se enfrenta hoy con grandes retos de nuevo cuño como son el terrorismo, los imprevisibles desastres naturales o la propagación de epidemias", aseguraron los delegados, que convinieron en que para superar estos "desafíos" es necesario que los países europeos realicen "un esfuerzo concertado para formular una política de turismo europea".
Europa es el mayor mercado turístico regional tanto receptor como emisor, siendo responsable del 50% de las llegadas turísticas y de los ingresos por turismo mundiales, interactuando con distintos aspectos económicos y sociales. Por este motivo, los 300 asistentes a la conferencia 'Repercusión de la ampliación de la Unión Europea en el desarrollo turístico de Europa' consideraron que el sector turístico puede desempeñar un "papel protagonista en la integración europea".
Con respecto a esto, los delegados hicieron una referencia especial a la publicidad que ha supuesto la ampliación de la UE, que ha promovido la imagen de las nuevas incorporaciones y ha posibilitado el aumento del número de visitas a estos países. Asimismo, el crecimiento de las aerolíneas de bajo coste ha mejorado las conexiones a los destinos turísticos. Por otro lado, la ampliación ha beneficiado a los viajeros que han visto simplificados los trámites fronterizos, además de poder contar con un marco de protección que les garantiza, entre otras cosas, asistencia médica y una cultura del servicio reforzada.
Además los nuevos estados podrán beneficiarse del marco jurídico común y del desarrollo de las redes de transporte, teniendo en cuenta que también se prevé un aumento del poder adquisitivo que acelerará el aumento del número de viajeros hacia otros destinos europeos. En este sentido, los delegados consideraron que con el desarrollo de un turismo sostenible apoyado por la UE, el turismo interregional entre países miembros se verá reforzado.
Por otro lado, el turismo rural podría adquirir un papel cada vez más importante en los estados miembros, mientras que las distintas formas de "turismo social" podrían ayudar en la cohesión y en la lucha contra la exclusión debido a la pobreza, las diferencias culturales o las discapacidades físicas.
No obstante, los asistentes consideraron que uno de los mayores inconvenientes es que trabajadores especializados en turismo están abandonando los Estados miembros. Además, también destacaron los problemas en competencia de precios, prestación de servicios, calidad y fiabilidad derivados del hecho que es un sector dominado por microempresas o empresas pequeñas.
