MADRID, 1 Mar. (EUROPA PRESS) -
Un grupo de comunicadoras y periodistas se ha desplazado a la República Democrática de Congo (RDC) con el fin de conocer de primera mano la situación del país, y en concreto la de las mujeres forzadas a abandonar sus hogares, bien desplazadas dentro de su propio país u obligadas a migrar.
Entreculturas, Alboan, el Servicio Jesuita a Migrantes de España (SJM) y la Fundación Ellacuría han promovido este viaje, que se enmarca en el programa Mujeres en Marcha, con el objetivo de dar a conocer las violencias diversas que sufren las mujeres en los procesos migratorios, desde los relatos de las propias mujeres y desde el encuentro con comunicadoras de RD Congo.
Un grupo de periodistas españolas y mujeres comunicadoras de RD Congo como Caddy Adzuba, premio princesa de Asturias a la Concordia o Julienne Baseke, directora de AFEM, abordarán conjuntamente una realidad con múltiples aristas.
La tendencia creciente de la feminización de la migración, la doble discriminación a la que se enfrentan por ser migrantes y por ser mujeres, y la invisibilización de esta realidad y de sus consecuencias como la trata de personas, explotación laboral y sexual, violencias diversas, etc., demanda visibilizar y denunciar para concienciar, implicar y movilizar a la ciudadanía en la defensa de los derechos de las mujeres desde el origen, durante el tránsito y a su llegada a destino.
Mediante la generación de espacios de encuentro y diálogo entre mujeres comunicadoras de ambos contextos, local y europeo, persiguen el intercambio de conocimiento y de experiencias, clave para profundizar en las causas que impulsan o fuerzan a las mujeres a migrar; conocer la labor estratégica de comunicación y de denuncia de organizaciones locales como AFEM; y escuchar las necesidades, demandas y sueños de mujeres que viven en contextos migratorios en Bukavu, RDC.
La situación política y social de la RD Congo es de extrema complejidad. En las últimas dos décadas el país ha sido escenario de conflictos internos y regionales que han creado repetidas crisis humanitarias. Las raíces de estos conflictos están en intereses geopolíticos y en la disputa por el control de la riqueza de recursos minerales.
La RDC cuenta con aproximadamente 4,5 millones de personas desplazadas internas y 811.000 personas refugiadas en los países limítrofes y en el África austral (UNHCR, 2018). En este contexto, las mujeres y niñas son utilizadas como arma de guerra, y convierten al país en uno de los que tiene más casos de violencia de género, en sus formas diversas, en el planeta.
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