Actualizado 14/02/2008 14:59

Los casos de neumonía se extienden por todo Afganistán mientras se elevan a 800 las muertes por el frío

MADRID, 14 Feb. (EUROPA PRESS) -

Los casos detectados de neumonía se extienden cada día por todo Afganistán desde que comenzó el invierno, uno de los más crudos que se recuerdan en el país y motivo por el que ya han muerto unas 800 personas, en su mayoría niños y ancianos, los colectivos más vulnerables ante el frío.

En el último mes se han detectado aproximadamente 170.000 casos de neumonía y otras infecciones respiratorias agudas que están siendo tratadas en centros sanitarios de todo el país, según informó hoy el Ministerio de Sanidad a la agencia de noticias de Naciones Unidas, IRIN.

Pero el portavoz de este departamento, Abdulá Fahim, alertó de que al menos 100 pacientes afectados por neumonía, la mayoría de ellos niños, murieron en el mismo periodo de tiempo. Entre las víctimas hay siete niños de la provincia de Badakhshan, situada en el noreste del país, donde un equipo médico de la organización benéfica británica Merlin ha tratado a 270 pacientes.

En cuanto llegó al distrito de Shar e Buzorg, uno de los más afectados por las fuertes nevadas, el equipo médico se vio "pronto abrumado por la población que les pedía ayuda mientras otros permanecían tirados en la nieve", indicó Sophia Craig, directora de Merlin en Afganistán.

Las autoridades también han mostrado su preocupación por el aumento en el número de enfermedades relacionadas con el frío en el distrito de Ghor, provincia de Daykundi, y las provincias de la región del Nuristán, cerca de la frontera con Pakistán, donde muchas comunidades no tienen un fácil acceso a alimentos al vivir en zonas casi inaccesibles.

"Mucha gente es susceptible de tener neumonía e infecciones respiratorias agudas debido a la inseguridad alimenticia, la falta de conciencia ante las enfermedades y los problemas higiénicos", explicó Craig.

MUERTES Y AMPUTACIONES

Afganistán se enfrenta este año a uno de los más duros inviernos en 25 años y más de 800 personas ya han muerto, según el Departamento Nacional de Gestión de Desastres. Además, a unas 90 personas se les ha tenido que amputar algún miembro por congelación, indicaron las autoridades de la provincia de Herat, en el oeste del país.

En cuanto a los daños materiales que hasta ahora han provocado los efectos del invierno, las autoridades informaron de 730 casas destruídas, mientras que 316.055 cabezas de ganado han muerto por las duras condiciones.

Las fuertes nevadas también han bloqueado numerosas carreteras en algunas de las 34 provincias afganas, lo que hace aún más complicado la llegada de ayuda humanitaria. No obstante, Craig consideró que la respuesta que está proporcionando el Ministerio de Sanidad está siendo "muy buena" teniendo en cuenta las condiciones.