Actualizado 04/12/2012 14:52

La Audiencia impone 17 años de cárcel al guardia civil acusado de matar a su mujer de 14 disparos en Utiel (Valencia)

VALENCIA, 4 Dic. (EUROPA PRESS) -

La sección quinta de la Audiencia Provincial de Valencia ha impuesto 17 años de prisión para un hombre, guardia civil, acusado de matar a su mujer de 14 disparos en septiembre de 2009 en la localidad valenciana de Utiel. Un jurado popular consideró a este hombre, por unanimidad, culpable de un delito de asesinato.

En concreto, el tribunal valenciano fija esta pena de prisión por un delito de asesinato con la circunstancia agravante de parentesco y la atenuante de confesión. Asimismo, le condena a indemnizar a los padres de la víctima con 100.000 euros en total, y al hermano con 12.000 euros. Sin embargo, considera que el Estado no debe ser responsable civil subsidiario puesto que considera que cuando el hombre cometió el crimen no actuaba en el ejercicio de sus cargos o funciones --agente--, si no que estaba fuera de servicio, en el domicilio conyugal.

El hombre, que responde a las iniciales J.A.C.C., reconoció durante el juicio el asesinato pero aseguró que no oyó los tiros y que se quedó "sorprendido" y "asustado" por lo que pasó. También afirmó que en ese momento estaba "ofuscado" y que era como si estuviera ciego, porque ni tan siquiera veía a la víctima mientras le estaba disparando.

El hombre y la víctima mantuvieron una relación de noviazgo durante seis años, y estuvieron casados otros ocho. Residían en una vivienda, propiedad de los padres de ella, en la localidad de Utiel. El acusado definió durante el juicio su matrimonio como "normal, como cualquier pareja", y explicó que tenían discusiones "normales" pero sin violencia física.

El día 7 de septiembre de 2009, sobre las 20.00 horas, cuando la mujer iba a salir de su casa, su esposo salió tras ella para que no se fuera. Seguidamente, la víctima volvió a entrar en el domicilio, cerró la puerta con llave y dejó en la escalera a su pareja, según consta como probado en la sentencia.

El hombre consiguió romper la puerta y entró en la casa. Se dirigió a su habitación, de donde cogió su arma reglamentaria, y volvió a la salita, lugar en el que se encontraba su esposa. Ante ella, con la intención de matarle, le disparó con el arma hasta 14 disparos. La mujer falleció como consecuencia de las heridas.

El agente, nada más disparar a su esposa, llamó a un sargento y a un cabo compañeros suyos, y les dijo: 'He hecho una trastada'; 'He matado a Inma, la he matado, la he matado'. Justo por esta actitud, el tribunal estima la circunstancia atenuante de confesión, porque entiende que el hecho de que fuera él quien confesara la noticia "hubo de simplificar considerablemente la instrucción o investigación del delito".