Actualizado 16/03/2009 18:03

Una ONG expulsada de Sudán admite que consideró cooperar con el TPI pero que rechazó la idea


NUEVA YORK, 16 Mar. (Reuters/EP) -

Una de las organizaciones humanitarias que han sido expulsadas de Sudán tras la orden de arresto emitida por el Tribunal Penal Internacional (TPI) contra el presidente de este país, Omar Hassan al Bashir, ha admitido que consideró cooperar con el tribunal, pero que después rechazó la idea.

El International Rescue Committee (IRC) es una de las 13 ONG a las que el Gobierno de Jartum prohibió seguir operando en la región de Darfur alegando que habían cooperado con el TPI en su investigación contra Al Bashir, al que se acusa de crímenes de guerra y crímenes contra la Humanidad.

Naciones Unidas ha asegurado que no tiene información de ninguna cooperación entre las ONG y el TPI, mientras que las organizaciones afirman que se han negado a cooperar porque consideran que esto minaría sus objetivos humanitarios.

Pero el embajador de Sudán ante la ONU, Abdalmahmoud Abdalhaleem, citó a IRC como una de las colaboradoras más importantes del tribunal internacional. Según señaló, este grupo no sólo ayudó al fiscal del TPI Luis Moreno Ocampo, sino que firmó un "memorando de entendimiento" para sellar esta cooperación.

Sin embargo, la portavoz de IRC, Melissa Winkler, negó estas acusaciones y desmintió que la organización firmara un acuerdo con el tribunal de La Haya, aunque reconoció que una vez consideró hacerlo. En un documento interno de la ONG de 2005 al que tuvo acceso Reuters, el director para Sudán de IRC, Joseph Aguettant, escribió a algunos compañeros subrayando las pautas a seguir para colaborar con el TPI, ya que justificaba que su trabajo ayudaría a la población sudanesa y llevaría a los criminales ante la justicia.

"El borrador del documento fue revisado por la dirección de IRC y lo rechazó como política. La política que se adoptó luego ordenaba específicamente al personal que no se comunicara de ninguna manera con el TPI y que no apoyara las investigaciones del TPI", explicó Winkler.

En su opinión, el Gobierno sudanés ha obtenido el documento y ha utilizado "inapropiadamente" algunos fragmentos "para acusar a IRC de facilitar información al TPI". Según Winkler, "la acusación carece de base y es falsa".