MÁLAGA, 15 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Centro Andaluz de las Letras (CAL), gestionado por la Consejería de Turismo, Cultura y Deporte a través de la Agencia Andaluza de Instituciones Culturales, llevará a cabo un encuentro con la escritora finlandesa Sofi Oksanen, en diálogo con el periodista de 'El País' Nacho Sánchez.
En concreto, dialogarán a propósito de 'Dos veces en el mismo río. La guerra de Putin contra las mujeres' (Salamandra) de Oksanen, una crónica tan urgente como necesaria, sobre los crímenes sexuales de las tropas rusas en territorio ucraniano.
Oksanen es autora de 'Purga' novela con más de medio millón de ejemplares vendidos en cuarenta países y galardonada con los premios más importantes de Finlandia, colocándose en el panorama literario internacional. La sede del Centro Andaluz de las Letras la recibirá el lunes, 18 de marzo, a las 19.30 horas, con entrada libre hasta completar aforo, han indicado desde la Junta en un comunicado.
Sofi Oksanen realiza en 'Dos veces en el mismo río. La guerra de Putin contra las mujeres', desde el 14 de marzo en las librerías, una indagación de primer orden sobre la historia de la misoginia en Rusia y una valiosa reflexión acerca de las tropelías de los ejércitos, que da voz a las víctimas de unas prácticas que podríamos creer superadas, pero que nunca han llegado a desaparecer.
Dos años después de la invasión rusa en Ucrania, Oksanen se adentra por primera vez en el campo de no ficción, tras su exitosa novela 'Purga', tomando como hilo conductor dos dramas separados por ochenta años: el de su tía abuela estonia que, tras una noche de vejaciones por parte del ejército soviético en 1944, enmudeció para siempre, y el de muchas personas que hoy siguen padeciendo un destino similar a manos de los soldados rusos.
A partir de estos casos, Sofi Oksanen nos muestra cómo, aunque nadie se bañe dos veces en el mismo río, la historia del imperialismo no deja de repetirse.
Así, la hoja de ruta de Putin recuerda a la de la emperatriz Catalina la Grande en Crimea en 1783 y a la de la Unión Soviética de Stalin, y las tres comparten el mismo modus operandi: negar la cultura e incluso la humanidad del supuesto enemigo, echando mano de una incesante propaganda y repitiendo el mito de la invencibilidad rusa, deportar o asesinar a poblaciones enteras y usar la violencia sexual como un arma más en el contexto de la guerra.
