El CES ve "consecuencias inquietantes" en el futuro si no se aumenta el gasto en inmigración, formación e I+D+i

BILBAO 25 Oct. (EUROPA PRESS) -

El Consejo Económico y Social Vasco (CES) advirtió hoy de que el futuro puede tener "consecuencias inquietantes" si no se incrementa el gasto destinado a la gestión de la inmigración, la formación de los ciudadanos y la investigación, desarrollo e innovación (I+D+i).

Durante la presentación de la Memoria Socioeconómica de 2005, el presidente del CES, Antxon Lafont, animó a comparar Euskadi con otros países, "no sólo con otras comunidades autonómas", y reconoció "preocupante" la situación del País Vasco en algunos ámbitos, respecto a países de reciente integración en la Unión Europea, como Letonia o Estonia.

En este sentido, aseguró que estos países "tienen un nivel de formación muy superior" al detectado en Euskadi, al tiempo que destacó una "evolución apenas peceptible" en I+D+i. "Es grave que no haya más variaciones", precisó.

Respecto a la gestión de la inmigración, indicó que "la necesidad de trabajadores inmigrados no está suficientemente cuantificada" y, aunque señaló que a 1 de enero de 2005 había un total de 72.767 personas extranjeras empadronadas en el País Vasco, reconoció que "se sabe que hay muchísimos más".

Por ello, animó a aumentar el gasto destinado a la gestión de la inmigración, la formación de los ciudadanos e I+D+i porque, agregó, "si no se gasta más dinero, podrá haber consecuencias inquietantes y dentro de poco. El futuro es inquietante si no se toman algunas medidas".

OTROS DATOS

En la Memoria Socioeconómica de 2005 también se pone de manifiesto el crecimiento vegetativo positivo, con una población de 2.124.846 habitantes (26.250 más que en el año 2000), y se reclaman medidas para conciliar la vida laboral y familiar ya que, según explica, "algo más de 5.000 hogares no disponen de plaza en un centro escolar o guardería para sus hijos y más de una cuarta parte de los casi 50.000 menores de tres años recurren a los abuerlos para su cuidado".

Asimismo, en el informe se destaca como "uno de los principales problemas sociales" la atención a las personas mayores dependientes y se resalta la preocupación, en materia de medio ambiente, por el "mal estado" de las aguas continenetales, el aumento de la emisión de gases de efecto invernadero en un 35%, la generación de residuos peligrosos y la afectación por sustancias contaminantes de la calidad del aire.

En el mercado laboral, se muestra una "evolución positiva" en cuanto a la tasa de paro y cree necesario avanzar en la elevada temporalidad, la inserción laboral de la juventud y la eliminación de algunas de de las diferencias de género aún existentes.

Por último, el informe recoge un crecimiento del PIB del 3,9%, por encima del Estado (3,4%) y de la UE (1,6%), aunque lamenta que los precios de la vivienda "siguen aumentando" y que, según indicó Lafont, "es difícil romper una lógica de especulación si, como se ha anunciado, se construye menos".