Reclaman en las alegaciones presentadas la desestimación de proyecto por "sus impactos medioambientales y sociales"
BILBAO, 13 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Plataforma Enkarterrin Makroeolikorik Ez ha entregado este miércoles un total de 3.242 firmas contra el proyecto "Parque Eólico Artzentales-Sopuerta y su línea de evacuación", propuesto por la empresa Euskal Haizie, en los términos municipales de Artzentales, Sopuerta, Galdames, Muskiz, Zalla y Güeñes en la comarca de Encartaciones.
Representantes de esta plataforma han hecho entrega ante la sede de la Delegación territorial de Administración Industrial de Bizkaia de estas más de 3.000 alegaciones populares contra el "megaproyecto", en las que solicitan la desestimación total del mismo "por sus impactos medioambientales y sociales, y por su inconsistencia respecto a cualquier objetivo climático o de soberanía energética".
Los miembros de este colectivo, que también han llevado a cabo una concentración en el exterior de la sede del Gobierno vasco, han afirmado que se declaran "en contra de la industrialización y privatización de las montañas comunales, y en contra del modelo macrorrenovable que empobrece a la población de los territorios afectados, en beneficio de los grandes capitales".
Según han explicado, estas 3.000 alegaciones son el resultado de una intensa campaña que han llevado a cabo en las últimas semanas y ha destacado que han recibido también el apoyo de los grupos municipales independientes Karrantza Zabala, Zalla Bai y CLI de Balmaseda y de los
sindicatos CGT, CNT, ELA y ESK.
Asimismo, han indicado que, a pesar de que tanto el Ayuntamiento de
Sopuerta como el de Artzentales aprobaron mociones en las que se posicionaban en contra de este proyecto en su fase previa, no han realizado pasos administrativos para proteger las zonas afectadas ante una posible industrialización. En este sentido, han recordado que la acción de los ayuntamientos es "fundamental" para impedir la implantación de estos megaproyectos.
Según han señalado, van a continuar con su actividad porque el problema que "amenaza a Enkarterri es parte de un proceso más amplio de colonialismo energético y especulación financiera". "Pretenden teñir de verde el expolio de los recursos naturales por parte de grandes empresas, con la connivencia de la administración. Hay que pararlos", han subrayado.
