Los gimnasios vizcaínos lamentan que están "olvidados" por las instituciones y piden "ayudas reales"

BILBAO 1 Oct. (EUROPA PRESS) -

La Asociación Vizcaína de Empresarios de Actividad Física (AVEAF) ha denunciado que las instituciones se "olvidan" de los gimnasios pese a que han sido un sector "muy castigado" por la pandemia y, por ello, ha reivindicado que "ha llegado el momento de los hechos, y no de los discursos", y ha pedido "ayudas reales".

AVEAF ha hecho público este viernes un comunicado en el que afirma sentirse "olvidada y minusvalorada" por las instituciones a pesar de ser "una asociación activa" a lo largo de toda pandemia. "En estos últimos días hemos contemplado atónitos, una vez más, cómo se lanzan grandes campañas de ayuda para diversos sectores y no incluyen a uno que se ha visto y se sigue viendo muy castigado por esta pandemia", ha denunciado.

La asociación ha lamentado que, aunque ha estado durante estos últimos meses en "contacto permanente" con las diferentes administraciones, su trabajo no se refleja en "la percepción que tienen de la realidad de un sector que a día de hoy sigue lastrado por la pandemia". A su entender, es "inconcebible que se trate así a un sector que resulta vital y esencial para la buena salud de las personas".

De este modo, ha señalado que "esta realidad solo se ve reflejada en los discursos y no en los hechos", que denotan "falta de interés por un sector y por el trabajo que realiza, así como por las condiciones en las que tiene que ser llevado a cabo", y demuestran "desconocimiento" de la situación que atraviesa y que "perdurará en el tiempo".

"No apreciamos empatía con un sector que, a pesar de sus esfuerzos y múltiples reivindicaciones respecto a la necesidad de ayudas, se encuentra fuera del campo de acción de unas instituciones que no aprecian en su justa medida a todos los centros de actividad física de nuestro territorio", ha insistido.

RESPETO Y AYUDAS

AVEAF considera que "ha llegado el momento de los hechos y no de los discursos, de los planes de acción y no de las buenas palabras o intenciones". Por ello, ha demandado "respeto y planes de ayuda".

Según han explicado sus responsables, el sector solicita "menos palmadas en la espalda y más ayudas reales para los miles de familias, de trabajadores y trabajadoras que siguen ejerciendo su profesión en unas condiciones de máxima dificultad y, a pesar de ello, dando el máximo de sí mismos para seguir adelante".

"Es el momento de involucrarse de verdad por el futuro del sector y de los miles de puestos de trabajo que dependen de él", ha concluido.